
El convenio, financiado por el Fondo Social Europeo, fomentará la inclusión laboral y la formación práctica hasta 2028, con énfasis en colectivos vulnerables
J.G.P. / ICAL
La consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, presentó hoy un ambicioso convenio junto a la Fundación Santa María La Real y la Fundación Iberdrola, dotado con una inversión de 300.000 euros, para fomentar la empleabilidad de cerca de 420 personas en la región hasta el 31 de octubre de 2028. Financiado por el Fondo Social Europeo, este proyecto se alinea con las políticas activas de empleo del Servicio Público de Empleo y busca conectar el talento local con las demandas del mercado laboral, promoviendo la inclusión social y el desarrollo sostenible. “Defendemos la búsqueda activa de empleo y la inclusión social a través de esta colaboración, que tendrá un impacto transformador en el territorio”, afirmó García.
El convenio se estructura en torno a la creación de hubs de empleabilidad, descritos por la consejera como “espacios dinamizadores, colaborativos y especializados” que ofrecerán formación práctica e intensiva, así como orientación laboral personalizada. Estos hubs se centrarán en cuatro pilares fundamentales: abordar la exclusión laboral, reducir la brecha digital, impulsar el desarrollo sostenible a nivel local y fomentar la colaboración público-privada. García destacó que el proyecto no solo busca generar empleo, sino también “crear agentes del cambio” en Castilla y León, con un enfoque particular en colectivos vulnerables.
El programa incluye tres lanzaderas de empleo diseñadas para maximizar el impacto en la región. La primera, la Lanzadera de Empleo Activo, trabajará con equipos heterogéneos de personas desempleadas para mejorar sus competencias y acceso al mercado laboral. La segunda, la Lanzadera de Empleo Nómada, llevará acciones específicas a diferentes puntos del territorio, garantizando que las zonas más remotas también se beneficien. Por último, la Lanzadera Despega se dirigirá a personas en situación de especial vulnerabilidad, ofreciendo un apoyo más intensivo. “El objetivo es desterrar el estigma del desempleo y acercar oportunidades a quienes más lo necesitan”, explicó García, quien también resaltó la importancia de las sinergias con otras iniciativas para amplificar los resultados.
El presidente de la Fundación Santa María La Real, Ignacio Fernández Sobrino, calificó el acuerdo como “muy relevante” y una oportunidad para consolidar el trabajo de la fundación en la región. “Nuestra actividad está volcada en las personas, y este convenio nos permite desarrollar nuevos hubs de empleabilidad que refuercen nuestra misión”, señaló.
Fernández Sobrino destacó el éxito previo de la fundación, que ha logrado la inserción laboral de cerca de 1.000 personas en toda España, y puso como ejemplo el caso de Aguilar de Campoo, a la que calificó como “la reina del empleo” gracias a su sólida infraestructura industrial. “No hay mejor manera de fomentar un territorio que permitir que la gente se quede porque tiene trabajo”, añadió, subrayando la importancia de la orientación territorial para evitar la despoblación.
Por su parte, Miguel Calvo, delegado institucional de Iberdrola España en Castilla y León, enfatizó el compromiso de la Fundación Iberdrola con un futuro “más verde y equitativo”. Según Calvo, el programa combina técnicas innovadoras de búsqueda de empleo, como el manejo de redes sociales y entrevistas online, con un enfoque en paliar la brecha digital, un obstáculo clave para muchos desempleados. “Este es un proyecto líder pegado al empleo verde, que no solo busca la inserción laboral, sino también un impacto positivo en la sostenibilidad”, afirmó. Calvo destacó que el programa está diseñado para lograr un elevado porcentaje de inserción laboral, gracias a su enfoque práctico y adaptado a las necesidades actuales del mercado.
La colaboración entre la Junta, la Fundación Santa María La Real y la Fundación Iberdrola fue resaltada por los tres representantes como un modelo de éxito en la cooperación público-privada. García agradeció especialmente el trabajo de la fundación en la empleabilidad de mujeres víctimas de maltrato, un colectivo que recibirá una atención prioritaria. Fernández Sobrino, por su parte, celebró la confianza depositada por la Junta, mientras que Calvo subrayó el papel de Iberdrola en apoyar iniciativas que combinan inclusión social y sostenibilidad.
Con una ejecución prevista hasta 2028, este convenio se posiciona como una herramienta clave para transformar el panorama laboral de Castilla y León, apostando por la formación, la innovación y la equidad. La previsión de emplear a 420 personas, junto con el enfoque en colectivos vulnerables y el desarrollo de empleo verde, convierte a este proyecto en un referente para otras regiones que buscan combatir el desempleo y fomentar el desarrollo local.