El Premio Cervaria al Mejor Cortometraje del Festival fue para “Joselico”, de Sergio Máresc
El III Festival de Cine Rural y Montaña de Cervera de Pisuerga reconocía en la tarde de ayer el talento del cine rural en una edición marcada por la emoción, la memoria y la lucha contra la despoblación, donde Pablo Quijano recibía el Cervaria de Honor 2025.
La última edición del Festival de Cine de Cervera, a la que han asistido unas 800 personas, ha concluido con una emocionante gala de entrega de premios que reafirma el compromiso del certamen con el medio rural, sus historias y sus gentes. En un año en el que se ha destacado la diversidad de miradas sobre la vida fuera de las ciudades y en el que el festival ha otorgado el Cervaria de Honor al director Pablo Quijano, en reconocimiento a su trayectoria, sensibilidad artística y firme compromiso con la representación del mundo rural desde una perspectiva honesta y profundamente humana.
PALMARÉS 2025
• Premio Cervaria de Honor:
Pablo Quijano, por su trayectoria como cineasta comprometido con el entorno rural, la memoria emocional de los territorios y la dignificación de las pequeñas historias que habitan en los márgenes.
• Premio Cervaria al Mejor Cortometraje del Festival:
“Joselico”, de Sergio Máresc
Por su profunda conexión con la realidad del mundo rural, evocando la infancia y resaltando la resiliencia ante el despoblamiento. El protagonista encarna la capacidad de reinventarse en un entorno donde es “el único niño”.
• Premio Cervaria al Mejor Cortometraje de la Montaña Palentina:
“Brannia Ossaria”, de Miguel Sánchez González
Por su excelente realización técnica y artística al contar una historia profundamente ligada a la identidad de la Montaña Palentina. Reafirma la necesidad de repoblación y el valor de este territorio como un lugar para vivir y crecer.
• Premio Cervaria al Mejor Cortometraje Castilla y León:
“Calcetines”, de Miguel Ángel Olivares, Ana Beyron y Alejandra Beyron
Por su valiente y sensible representación de la homosexualidad en el ámbito rural, abordando los prejuicios y la clandestinidad con un mensaje de amor y libertad.
• Premio Cervaria a Mejor Director:
Howi Álvarez, por “Soledá”
Por su habilidad para transmitir la soledad no elegida en el entorno rural a través de una narrativa sutil que refleja la necesidad de compañía como motor vital.
• Premio Cervaria a Mejor Directora:
Leire Egaña, por “Oinez”
Por la originalidad al explorar cómo el entorno natural condiciona el diálogo y la conexión humana en la montaña.
• Premio Cervaria Piedad Isla a la Mejor Fotografía:
Fran Córdoba, por “Ius del Tiempo”, de Roberto F. Canuto y Xiaoxi Xu
Por su capacidad de recrear ambientes rurales únicos en condiciones lumínicas complejas, reflejando con fuerza visual la emoción y la memoria de los espacios.
Menciones especiales del jurado:
• “Las que fueron a servir”, de Patricia Hernández Guerrero
Por visibilizar la historia silenciada de las mujeres que emigraron desde los pueblos para servir en hogares urbanos, recordando la lucha por la igualdad desde el pasado rural.
• “Susurros”, de Antonio Llaneza Díaz
Por ofrecer una visión del regreso al origen como una elección vital y cultural, subrayando el florecimiento personal posible en el entorno rural frente a grandes capitales.
Y el reconocimiento especial del consistorio al documental “Teleclub” de Daniel Marí y Ana de la Eranueva. Reseñar que el premio del público fue para el trabajo “Revivir el campo”