Los finalistas proceden de Alicante, Asturias, Badajoz, Cádiz, Huesca, La Coruña, Madrid, Tarragona, Toledo y Vizcaya
La organización de Palencia Brava eligió a los 16 finalistas de toda España que competirán en la Gran Final del VI Concurso Internacional de Elaboración de Patatas Bravas, en la que también participarán tres cocineros palentinos que se clasificarán en la fase previa del domingo 28 de septiembre.
De esta manera, se conformará el cuadro definitivo de la final, que se celebrará el lunes 29 de septiembre de 2025 en el Hotel Rey Sancho de la capital palentina, donde un jurado de reconocido prestigio evaluará los platos y elegirá las mejores patatas bravas del mundo 2025.
Los 16 finalistas proceden de diez provincias repartidas por toda la geografía española, concretamente llegarán desde Alicante, Asturias, Badajoz, Cádiz, Huesca, La Coruña, Madrid, Tarragona, Toledo y Vizcaya.
A ellos se sumarán tres cocineros que saldrán elegidos de una fase previa entre participantes de la capital y la provincia palentina, la cual se celebrará el domingo, 28 de septiembre, cuando elaborarán sus platos frente al jurado profesional.
Al día siguiente, 29 de septiembre, se desarrollará la gran final, en la que los finalistas mostrarán sus elaboraciones ante el público, un jurado popular y el jurado profesional reconocido prestigio, que integrarán Aarón Ortiz García (del Restaurante Kabo), el chef Peña (Sibaritas Klub), Raúl del Moral (Chef de la Fundación Escuela Internacional de Cocina) y los influencers gastronómicos Sezar Blue y Charlito Cook. Los finalistas cocinarán sus bravas en directo, en un ‘showcooking’ abierto al público, que podrá seguirse vía streaming.
El jurado tendrá en cuenta los valores gastronómicos del plato (gusto, retrogusto, sabor, contraste y matices), también su viabilidad en barra o sala (si es factible realmente en el servicio), además del producto y su estética (montaje, color, espectacularidad y disposición) y la originalidad y la técnica (novedad, ingenio y solvencia técnica). La ponderación entre las puntuaciones obtenidas en estas cuestiones serán las que permitirán la elección de los ganadores de la edición.
Premios
El campeón del concurso ganará 1.500 euros en efectivo, 1.500 botellines Fuentes de Lebanza, un vídeo-reportaje profesional (Oceangrain Audiovisual, con un valor de 500 euros), un lote Cerealto y una obra de Antonio Guzmán Capel, mientras que el segundo clasificado obtendrá 1.000 euros en efectivo, 1.000 botellines Fuentes de Lebanza y también una obra del artista palentino, la misma que se otorgará al tercer clasificado, que también recibirá 500 euros en efectivo y 500 botellines Fuentes de Lebanza.
Además, se entregará un ‘Premio a la Innovación’, ‘Premio a la Estética’, ‘Mención Especial del Jurado’ y como novedad en 2025, ‘Mención Especial del Jurado Popular’.
Los tres clasificados palentinos para participar en la final, elegidos en la fase previa, obtendrán 15 cajas de productos Coca-Cola.
La patata brava es una tapa icónica nacida en el ecosistema de barras de posguerra. La evidencia histórica sitúa su popularización en Madrid (años 50–60) con casas como La Casona o Casa Pellico, la marca Las Bravas® (1959) y la mención bibliográfica de 1967 (Luis Carandell) como hitos vertebrales. En paralelo, la escuela catalana consolidó desde los 70 una versión con alioli + aceite/salsa picante, con bares de culto como Bar Tomás.
En Madrid, la familia de salsas “bravas” históricas se describe sin tomate, ligada con grasa/harina, pimentón y cayena, a veces con caldo; frente a variantes con tomate o alioli que arraigan en otras regiones. Esta diversidad estilística explica buena parte del magnetismo del plato y su evolución técnica en la alta cocina.
Desde 2020, Palencia acoge ‘Una de Bravas’, referente internacional que premia sabor, técnica, viabilidad y estética en torno a la tapa española más transversal. El certamen ha visto coronarse a cocineros de primer nivel y consolidar estilos regionales con identidad propia. Seis ediciones consecutivas en las que tanto participantes como jurado han sido, y son, ‘Top’ mundial. Por Palencia Brava pasan cada año Estrellas Michelin, creadores de contenido y periodistas gastronómicos del más alto nivel.


