La pieza, de grandes dimensiones y con un importante valor artístico y eclesiológico, representa a San Cipriano perdonando a un lapsi
El pasado lunes, 11 de agosto, durante los trabajos de retirada de un lienzo del siglo XVI que representa el martirio del apóstol San Andrés en la parroquia de San Cipriano de Pedraza de Campos, apareció detrás una tabla con pintura al temple, también del siglo XVI y anterior al óleo.
La obra, de 185 centímetros de alto por 150 de ancho, muestra un boceto de San Cipriano, titular del templo, sentado en su cátedra mientras perdona a un lapsi arrodillado, acompañado por un diácono, tres personas más, un preste y otra figura. En la parte superior se representa al Espíritu Santo entre nubes.
Según los expertos, el hallazgo es relevante tanto desde el punto de vista artístico como eclesiológico, ya que se conservan muy pocos bocetos de esta época. También abre la puerta a nuevas investigaciones sobre el cambio iconográfico vinculado a la doctrina del Concilio de Trento (1545-1563).
El delegado diocesano de Patrimonio, tras inspeccionar el retablo, señaló que podrían existir más tablas ocultas detrás de los otros tres lienzos. La pieza será estudiada y posteriormente restaurada.
