Suponen más del 85%, frente al 15% de las automáticas
David Herrero / ICAL
Castilla y León congrega actualmente un total de 217 gasolineras automáticas y experimenta un crecimiento del 31,5 por ciento en comparación con 2023, donde el número de instalaciones se cifraba en 165, según el Informe Sectorial 2025 de la Asociación Española de Estaciones de Servicio Automáticas (AESAE).
A tenor de los datos recogidos por la Agencia Ical, las gasolineras automáticas representan el 29 por ciento del mercado nacional y alcanzan las 3.477 instalaciones activas, lo que supone un crecimiento del 60 por ciento en relación a 2023 (2.174), cifra que se disparó hasta el 294 por ciento desde 2019 (882).
Por autonomías, las Islas Canarias se posicionan a la cabeza tras multiplicar por cinco su red, al pasar de 29 estaciones en 2023 a 154 en 2025, lo que supuso un incremento del 431 por ciento; seguida por Navarra, con un ascenso del 321 por ciento hasta las 101; País Vasco, con un 120 por ciento y 99 gasolineras; y Castilla-La Mancha, con un 105 por ciento y 263 estaciones totales. Por el contrario, Baleares es la única comunidad que reduce su número, al pasar de 24 en 2023 a 13 en 2025 (-46 por ciento).

A diferencia, en números absolutos, Andalucía lidera en volumen total con 745 gasolineras. Tras ellas se posiciona Cataluña (534), Comunidad Valenciana (482) y Madrid (255). En el lado opuesto se localiza Baleares (13), La Rioja (23) y Cantabria (35).
Penetración
Las estaciones de servicio automáticas presentan en la Comunidad un 23 por ciento de penetración, cuyo mercado potencial se cifra en el 77 por ciento, lejos de los datos de penetración que registra Navarra (39 por ciento) y Comunidad Valenciana (37 por ciento), las más altas del conjunto nacional.
Por provincias, Ávila, ligeramente por encima del 15 por ciento, y Palencia, por debajo de esa barrera, se encuentran entre las cinco provincias con menor porcentaje de penetración en España. Dentro de Castilla y León, Soria lidera dicha penetración, al posicionarse en la franja entre el 40 y el 45 por ciento; seguida por Segovia y Valladolid, con el 25-30 por ciento.
Burgos, Salamanca y Zamora (franja entre el 20 y 25 por ciento) y León, con el 15-20 por ciento cierran la tabla autonómica, sólo por delante de Ávila y Palencia, según el Informe Sectorial 2025 de la Asociación Española de Estaciones de Servicio Automáticas.
Entre los factores que explican el crecimiento, desde AESAE señalaron el cambio de hábitos de consumo, la búsqueda de ahorro económico en un contexto de inflación energética, la expansión territorial hacia zonas donde apenas existía este modelo, la normalización como opción estándar en la mente del consumidor y la eficiencia y sostenibilidad, con una “reducción de costes operativos y alineación con los objetivos europeos de transición energética”.


