El pasado año la Guardia Civil detectó 2.225 infracciones penales en la Comunidad, de las que el 42,7% correspondieron a positivos por alcohol o drogas
Palencia cerró el último año con 158 detenidos e investigados por delitos contra la seguridad vial, un incremento del 6% respecto al ejercicio anterior. Esta subida se enmarca en un contexto autonómico en el que Castilla y León alcanzó su cifra más alta de la serie histórica: 2.225 casos, un 5,1% más que en 2023 y un 29,5% por encima de los datos de 2017, según datos del Ministerio del Interior recogidos por Ical.
A pesar de las campañas de concienciación y del aumento de controles de la Guardia Civil, los positivos por alcohol y drogas continúan siendo la principal causa de infracción penal: 951 detenidos, 27 más que en 2023, lo que supone el 42,7% del total.La segunda causa más habitual vuelve a ser conducir sin permiso o con el carnet sin puntos, con 833 imputaciones (+21), que representan el 37,4% del total.El exceso de velocidad continúa siendo minoritario: 37 casos, nueve más que en 2024, equivalentes al 1,6% de las detenciones.
Comportamiento desigual por provinciasLa evolución no fue uniforme en Castilla y León. Los mayores aumentos se dieron en Salamanca (+24,3%, 235 casos), Segovia (+22,7%, 286) y Ávila (+20,6%, 216).También crecieron Valladolid (345, +11,6%) y Palencia (158, +6%).Por el contrario, los descensos se produjeron en Burgos (–14,5%, 236), Soria (–5,1%, 135), Zamora (–5,1%, 205) y León (–0,9%, 409).
A nivel nacional, se contabilizaron 24.676 detenidos o investigados, un 1,1% menos que el año anterior.
“No existe conciencia real del riesgo”, alerta Stop AccidentesJeanne Picard, secretaria general de la ONG Stop Accidentes, alerta de que esta evolución confirma que la “conciencia del riesgo al volante continúa sin existir”, especialmente entre los mayores de 40 años, donde el alcohol “sigue asociado a la diversión”. Destaca que entre los jóvenes sí ha calado el mensaje de que “el conductor no bebe y es responsable de llevar a casa a todos”.
Picard señala que el problema se agrava cuando se combinan alcohol, drogas, exceso de velocidad y uso del móvil: un “cóctel dramático”. Recuerda que “matar a un amigo o un familiar por beber o por una distracción es algo que nadie puede asumir”.
La secretaria de Stop Accidentes se muestra convencida de que saldrá adelante la reforma legal que rebajará la tasa de alcohol permitida de 0,25 a 0,1 mg/l, en trámite en el Congreso. Subraya que es una cuestión “de salud pública y de vida”, ya implantada en países como Suecia y Noruega, que registran las mejores cifras de seguridad vial de Europa.
Penas y sanciones: de multas a prisión y retirada del carnetDar positivo en un control puede suponer sanciones de 500 a 1.000 euros y la pérdida de 4 a 6 puntos. La reincidencia implica mil euros de multa, independientemente de la tasa.
Superar los 0,60 mg/l convierte la infracción en delito, con penas de 3 a 6 meses de prisión, multas de 6 a 12 meses, trabajos en beneficio de la comunidad y retirada del carnet entre 1 y 4 años.
El exceso de velocidad también se considera delito cuando se superan en 60 km/h los límites en vía urbana o en 80 km/h los de vía interurbana, con las mismas penas que la alcoholemia.
Negarse a realizar la prueba implica 6 meses a 1 año de prisión y retirada del permiso de 1 a 4 años.
Conducir sin carnet es delito desde 2008, con penas de 3 a 6 meses de prisión, multas de 12 a 24 meses o trabajos comunitarios de 30 a 90 días.
La conducción temeraria puede acarrear penas de 6 meses a 2 años y retirada del permiso hasta 6 años, y cuando existe “manifiesto desprecio por la vida”, las penas ascienden a 2 a 5 años de prisión y retirada del carnet de 6 a 10 años.
Los delitos contra la circulación —colocar obstáculos, derramar sustancias deslizantes, manipular señales o no restablecer la seguridad— conllevan penas de 6 meses a 2 años, multas de 12 a 24 meses o trabajos comunitarios de 10 a 40 días.
