Alberto Lajo capta la esencia de los momentos espontáneos en bodas. Su enfoque se centra en documentar emociones auténticas
En el arte de la fotografía nupcial, algunos profesionales destacan por su capacidad para plasmar la esencia real de cada instante. Alberto Lajo es uno de esos artistas que prefiere dejar que los momentos fluyan con naturalidad, creando imágenes llenas de autenticidad y emoción.
“Las fotografías ganan cuando son espontáneas. No hay que forzar situaciones, así los novios disfrutan y los recuerdos adquieren verdadero valor”, explica Lajo.
Con una amplia trayectoria en reportajes de boda, su enfoque profesional se centra en documentar la magia de esos días irrepetibles, ganándose la confianza de las parejas que buscan algo más que simples imágenes.
Momentos cargados de emociones
Entre los instantes que más valora capturar, los preparativos ocupan un lugar especial. “Son momentos cargados de emociones intensas, ilusión, nervios, alegría, que se comparten con los seres más queridos”, destaca el fotógrafo.
Para ofrecer un servicio completo, Alberto propone sesiones preboda y postboda, aunque tiene una recomendación clara, “suelo aconsejar la postboda, porque así la pareja puede dedicar el cóctel a disfrutar con sus invitados, sin interrupciones para el reportaje”.
Un recuerdo que perdura
Lajo subraya la importancia de seleccionar bien al profesional que inmortalizará este día único: “Es fundamental encontrar un fotógrafo con quien la pareja se sienta cómoda y que comprenda su estilo. Estos momentos son irrepetibles, y capturarlos adecuadamente marca la diferencia”.
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