El acuerdo, firmado en Palencia, refuerza la colaboración entre ambas instituciones para promover estudios conjuntos, propuestas en empleo, vivienda y bienestar, y la inclusión de la juventud en el desarrollo de Castilla y León
El Consejo de la Juventud de Castilla y León (CJCyL) y el Consejo Económico y Social de Castilla y León (CESCyL) firmaron hoy un nuevo protocolo de colaboración que renueva y amplía su compromiso conjunto para integrar la perspectiva de los jóvenes en las políticas públicas de la región. Este acuerdo, que da continuidad al firmado en 2021, busca fortalecer el trabajo coordinado entre ambas instituciones mediante la elaboración de estudios conjuntos, la presentación de propuestas y la participación activa de la juventud en los procesos consultivos, con un enfoque especial en empleo, vivienda, igualdad y bienestar.
En un acto celebrado en Palencia, la presidenta del CJCyL, Sandra Ámez Sáez, destacó la importancia de esta alianza para garantizar que las necesidades y propuestas de los jóvenes sean escuchadas. “Desde 2021, nuestra colaboración con el CESCyL ha sido muy fructífera, permitiéndonos aportar la visión de la juventud en proyectos de ley, decretos e informes. Este nuevo protocolo refuerza nuestro compromiso para que Castilla y León invierta en su juventud, abordando retos como la emancipación, el empleo y la vivienda”, afirmó. Ámez subrayó la relevancia del Grupo de Enlace del CESCyL, un órgano único en España donde el CJCyL tiene una presencia permanente, lo que permite a los jóvenes participar directamente en espacios de diálogo con la sociedad civil.
Por su parte, el presidente del CESCyL, Enrique Cabero Morán, expresó su satisfacción por la renovación del acuerdo y elogió el dinamismo del CJCyL. “Contamos con un Consejo de la Juventud excepcional, que ha enriquecido nuestro trabajo consultivo con informes y propuestas de gran calidad. Este protocolo consolida una colaboración que ya es prácticamente permanente y nos permite incorporar la voz directa de los jóvenes en temas cruciales como las relaciones laborales, la protección social y la calidad de vida”, señaló. Cabero destacó que el acuerdo facilitará la inclusión de recomendaciones específicas sobre juventud en el Informe anual sobre la situación económica y social de Castilla y León, que se presenta ante la Junta y las Cortes.
El protocolo, con una vigencia de cuatro años, establece un marco de cooperación para el intercambio de información, la elaboración conjunta de estudios y la presentación de propuestas en ámbitos como el empleo, la protección social, los servicios públicos, la igualdad y el bienestar. Según el documento, el CESCyL invitará al CJCyL a participar en las reuniones del Grupo de Enlace asegurando así la representación de la juventud en el diálogo con otras organizaciones de la sociedad civil.
Cabero enfatizó que la inversión en juventud es clave para abordar el reto demográfico de Castilla y León. “Nuestra comunidad es atractiva para la formación, con una oferta destacada en formación profesional y universidades, pero debemos garantizar que los jóvenes puedan quedarse y desarrollar sus proyectos de vida aquí. Esto requiere políticas activas en empleo, vivienda y protección social, y el trabajo conjunto con el CJCyL nos ayuda a identificar y proponer soluciones”, afirmó. En este sentido, destacó que el gasto en juventud debe considerarse “una inversión estratégica” para el presente y el futuro de la región.
Dos informes relevantes
Ámez, por su parte, anunció que el CJCyL presentará próximamente dos informes relevantes: uno del Observatorio de Emancipación, que analizará la situación de los jóvenes en educación, empleo y vivienda, y otro sobre el impacto del reciente decreto que regula la formación en escuelas de animación juvenil y tiempo libre. “Estos informes no solo presentan datos, sino que nos permiten dialogar con las administraciones, como la Dirección General de Juventud, para trasladar propuestas concretas y mejorar las políticas que afectan a los jóvenes”, explicó. El informe sobre las escuelas de tiempo libre, en particular, abordará los efectos del nuevo marco normativo en estas instituciones, con el objetivo de proponer ajustes que fortalezcan la formación juvenil.
La colaboración entre el CJCyL y el CESCyL, iniciada hace cuatro años, permitió avances significativos en la integración de la perspectiva juvenil en las políticas públicas. El CESCyL, creado en 1990, es el consejo económico y social más antiguo de España, mientras que el CJCyL, fundado en 1984, es una de las primeras instituciones de su tipo en la región. Esta trayectoria conjunta refuerza la importancia de esta alianza, que busca no solo analizar los retos de la juventud, sino también proponer soluciones concretas para garantizar su bienestar y desarrollo.
Ambos presidentes coincidieron en que el protocolo fortalece una visión positiva de Castilla y León como una región que apuesta por sus jóvenes. “Una sociedad longeva, como la nuestra, es un éxito histórico, pero necesita más personas jóvenes para no envejecer. Este acuerdo nos permite trabajar de manera coordinada para que los jóvenes sean protagonistas del crecimiento económico y social de la comunidad”, afirmó Cabero. Por su parte, Ámez destacó que la colaboración con el CESCyL “amplifica la voz de la juventud” y posiciona al CJCyL como un interlocutor clave ante las administraciones públicas.