El equipo morado termina 11º en su segundo año en Liga Gonalpi, tras una campaña de altibajos
El Palencia Fútbol Femenino cerró este domingo su temporada con una derrota en casa frente al Atlético Laguna (cuarto clasificado) por 2-4. El conjunto morado finaliza su segunda campaña en la Liga Gonalpi en la 11ª posición con 33 puntos, mejorando notablemente los 18 sumados el curso anterior.
El partido, previsto para las 13:00 horas, comenzó con retraso debido a un encuentro anterior, y arrancó con protagonismo para Lara, la portera juvenil que ha sido habitual en esta temporada, y que detuvo dos manos a manos en los primeros 15 minutos… pero las visitantes no cesaron en su ofensiva y marcaron dos dianas en apenas un minuto (20′ y 21′), el primero tras un balón a la espalda de la defensa y el segundo aprovechando una pérdida en campo propio. El equipo local encontró su premio justo antes del descanso para recortar distancias. Luchi, tras un córner ejecutado por Rocío, firmó el 1-2 con un remate bombeado. Pero la alegría duró apenas unos segundos: en la jugada siguiente, un nuevo fallo en salida permitió al Atlético Laguna anotar el tercero antes del descanso.
En la reanudación, María entró en portería en lugar de Lara, pero apenas pudo jugar unos minutos, ya que una lesión en la mano la obligó a retirarse. Como ya ocurrió en el último partido de la temporada pasada, Vero tuvo que ponerse bajo palos. Con este contratiempo, y las continuas pérdidas de tiempo, el partido se fue enfriando. El Atlético Laguna sentenció en el tramo final con el cuarto gol tras un balón largo al espacio al que no pudo llegar Vero en la salida y que la atacante visitante sí que pudo llevarse. Aun así, el equipo local no bajó los brazos. Luchi, de nuevo, anotó su segundo tanto con un disparo ajustado desde el vértice del área, dejando el definitivo 2-4 en el marcador.
Pese al resultado, el Palencia Fútbol Femenino cierra el año con una notable evolución respecto a la temporada anterior. La llegada de Javier Barreda al banquillo aportó solidez y una mejora en el juego colectivo, aunque varias rachas negativas impidieron al equipo aspirar a cotas más altas en una liga donde, por circunstancias, se abrió la posibilidad de ascender a más equipos de lo habitual.