La Plaza Mayor de Palencia ha sido el lugar elegido por toda la comunidad educativa del Colegio filipense Blanca de Castilla para celebrar el Día de la Paz y la No Violencia, este jueves 30 de enero.
Un acto que ha supuesto la culminación de un trabajo en aula sobre el cuadro de Guernica de Picasso, y ha permitido al alumnado “unir arte y compromiso encuadrado en nuestro plan de lectura: Tiempo de arte y cultura”.

Cada año, el 30 de enero, “miles de escolares nos juntamos para gritar bien fuerte por la paz. Alzamos nuestra voz en favor de aquellos que sufren y viven la guerra con excesiva normalidad. ¿Algo que también nos ocurre a nosotros?”, se preguntan desde el colegio de las Filipenses.
“Nos hemos acostumbrado a las noticias de conflictos y bombardeos en las guerras de moda, a creer que están lejos y que no van con nosotros. Este día nos ayuda a parar y a abrir los ojos, a observar aquellos conflictos y a reflexionar cómo construimos paz en nuestra vida diaria”.
Ante la constatación de que “los conflictos se repiten”, la reflexión de los alumnos y alumnas ha sido que “el verdadero cambio está en estos futuros adultos, en los pequeños gestos, en el abrazo, en el mensaje de amor que Jesús nos anima a vivir cada día. El cambio está en nosotros. ¡Arriba los corazones!”.