La Guardia Civil de Palencia detiene a un conductor por un hurto en un surtidor de carburantes y por su huída sin permiso de conducción
El diésel coqueteando con los dos euros y la gasolina unos 20 céntimos más barata. Un precio que no enjugan las ayudas del Gobierno de esos 20 céntimos por litro lo que ha provocado que los conductores traten de pagar lo menos posible por llenar el depósito de sus vehículos, bien buscando los surtidores más baratos, usándolos menos o apretando menos el acelerador y poniendo en práctica medidas de conducción eficiente. Pero hay quien ha ido más lejos -por poco tiempo- y ha tratado de que su visita a la gasolinera le saliera a ‘devolver’, pero solo durante un ratito.
Porque en la tarde de ayer, a plena luz del día, un conductor se aproximó a un depósito de carburantes de la localidad de Saldaña. Iba con un acompañante, pero fue el conductor el que, según la Guardia Civil, se acercó al interior de la oficina del surtidor. Cualquiera hubiera ido a pagar, pero, según la información de la Guardia Civil, el hombre en vez de dejar dinero, se lo llevó porque, presuntamente, sustrajo al descuido 1.049 € de la oficina. Un resultado mejor que el de los repostajes de la Fórmula 1.
Y como en las carreras, el hombre tras hacerse, presuntamente con el botín, picó acelerador y emprendió la huida. Con los 1.049 euros no tendría que preocuparse por la conducción eficiente.
Pero sí con el dispositivo que «inmediatamente» montó la Guardia Civil de Palencia con la colaboración y las señas de los empleados del surtidor. Un dispositivo con el que el hombre, de 39 años y residente en Villajoyosa (Alicante), se encontró llegando a la localidad de Carrión de los Condes por la CL-615.
Sin carné
Echado el alto por los agentes, además del hurto al descuido de la cantidad del dinero, le imputaron un delito contra la seguridad del tráfico, puesto que el hombre había llevado a cabo su huída a los mandos de un vehículo sin haber obtenido nunca el carné de conducir o una licencia de conducción.
Y por si fuera poco, al someterle a las pruebas de alcohol y drogas, el hombre arrojó un resultado positivo en las segundas.
¿Y el copiloto? Tras el visionado de las cámaras de seguridad del surtidor, se decretó su libertad sin cargos, al no tener, en principio, nada que ver con el hurto.
Las diligencias instruidas, junto a detenido, pasaron a disposición Juzgado Instrucción de Carrión de los Condes, por lo que parecía un repostaje perfecto, acabó saliendo caro, aunque por fortuna sin ningún tipo de daño personal.
