Los palentinos mostraron una cara desconocida en ataque, con un porcentaje horrible en tiros y pierden su primer encuentro de la temporada regular ante el Melilla (80-75)
Segundo partido de la semana a domicilio para el Súper Agropal Palencia. También, como el del martes, allende los mares. En Melilla. Y esta vez, por primera en temporada oficial, con Natxo Lezkano.
Un partido en el que queda demostrado que al Súper Agropal Palencia le han tomado la matrícula ya, lo que unido a que el motor morado no carburó excesivamente bien dio como resultado un partido de lo más ajustado y en el que el Palencia, en otro continente, mostró una cara a un continente de distancia de la que tiene acostumbrado, especialmente en el acierto -nefasto- en los tiros. 16 % en los de tres.
Con cierto retraso arrancó el encuentro en el Javier Imbroda de Melilla por fallos en el video marcador.
Saltó a la cancha el Palencia con otro nuevo cinco inicial: Wintering, Kunkel, Oroz, Álvaro Muñoz y Armus, que con intervención arbitral dio el primer balón para los morados que marraron el ataque con un triple fallado de Muñoz. Desde el 6,75 jugó sus posesiones el Palencia sin premio en esos tres primeros tiros.
Se adelantó el Melilla desde el tiro libre con un minuto de juego. Muñoz, ahora en penetración, sí conecto. Luego Armus, también por dentro. Corriendo el Palencia al contraataque. Pero sin acierto en el triple. 0 de 5.
En defensa, los palentinos se las veían para detener a los atacantes melillenses y Kunkel, en menos de tres minutos, cometió dos faltas. Al banquillo. Borg a cancha y Kamba. Pero el triple seguía desaparecido: 0-8 Tampoco a Jakovics le entraban. Y el marcador 8-4.
Parecía dominar, tener más el balón el Palencia, pero eran los africanos los que mandaban.
A la novena, Kamba, logró el objetivo desde el 6,75, después de una jugada en la que los palentinos movieron el balón para dejar liberado al 9 morado.
Un correcalles fue el partido hasta en el momento en el que Lezkano llamó a Vrankic, duda hasta última hora. Empató Jakovics el choque a 14 con el segundo triple del Súper Agropal Palencia. El letón puso desde el mismo punto a los palentinos por delante. Jakovics era la tabla a la que el cuadro del Súper Agropal se agarraba. Sus tres triples seguidos eran el único balance ofensivo de los palentinos. Tiempo muerto del Melilla con 17-20 a falta de poco más de un minuto para el final del cuarto.
Por dentro, poca cosa para el Supér Agropal. Como ejemplo, Ugochukwu, dentro, falló un mate.
Al final del cuarto, 22-23, con canasta postrera de Wintering.
Segundo cuarto.
El segundo cuarto arrancó con la lesión temporal de Cristian Diaz en el Melilla y con Wintering haciendo de sus penetraciones y canasta a aro pasado. Armus, por contra, era incapaz de meter ninguno de sus cuatro tiros libres. Al menos, llevaba ya 4 rebotes ofensivos. Y así, el marcador seguía ajustado sin el acierto en los triples (4 de 16). 26-25. Tiempo muerto de Lezkano.
Transiciones rápidas hacia ambas zonas. Casi sin respiro. Buscando las puertas de atrás los locales. Explotando la velocidad los visitantes para penetrar, sacar falta o tirar cómodos. Le benefició eso al Palencia: 33-39 a falta de 3,30 para el descanso. Curioso que hasta ese momento, Palencia sumaba más rebotes ofensivos (10) que defensivos (7).
El arreón del Melilla y varias jugadas alocadas de los de Lezkano redujeron la ventaja morada a solo un punto y que podría haber desaparecido si no hubiera sido por los fallos clamorosos del ataque local. Nuevo tiempo muerto del Súper Agropal, que jugaba sin pívot. Con Vrankic de puntal, sustituido por Armus en el tiempo muerto.
Por delante se colocó el Melilla ante un Palencia que comenzaba a intuir los problemas del principio de temporada, sin juego interior y con dificultades para anotar desde el exterior con solo 5 de 22 en triples y 16 de 40 en tiros de campo. Tampoco en los libres: 2 de 8.
Al descanso 42-39.
Tercer cuarto.
Tres posesiones sin acierto del Palencia relegaron a los morados hasta que Borg con su guante encestó la primera del segundo tiempo de bandeja. Era el único positivo de los morados porque el resto del ataque estaba totalmente bloqueado. Sin opciones. Ni desde el tiro libre. Armus, era el que más se colocó en esa distancia. Solo un acierto, para seguir atrás tres puntos, y con suerte porque los melillenses llevaban tres balones perdidos.
Con 45-42 llegaron dos antideportivas para el Melilla, que los palentinos no sacaron provecho, fallando la mitad de los tiros libres y la posesión. Borg, de triple, volvió a poner a los suyos 45-47 sin haber consumido cinco minutos. Otra vez el sueco, robando, corriendo y anotando, amplió la ventaja.
Se despegó el Palencia mejorando el juego interior. Tiempo muerto de Melilla con el 46-53. Nuevo robo de los morados, que defendían a toda pista, para seguir creciendo en el marcador, a pesar de la imprecisión en los tiros. Hasta Kunkel y Kamba fallaban tiros libres. 6 de 18 en el conjunto del equipo.
Al final del cuarto, 52-56.
Último cuarto.
Palmeo de Armus para abrir el cuarto y triple de Vrankic para ampliar la ventaja. 54-61. Pero Melilla no bajaba los brazos y, de la mano de Cristian Díaz, héroe local, empató el encuentro en un tris. 61-61. Tiempo muerto de Lezkano.
Fallando tiros, Palencia se dejó superar en el marcador. No había la claridad en el ataque y en defensa, el Palencia se descontroló. Le encontraban ahora las puertas de atrás. 68-63 a falta de menos de 5 minutos para el final.
Perdiendo posesiones, oportunidades para acercarse. Jugando sin criterio, rifando bolas, lanzando piedras el Palencia no parecía el Palencia. El Melilla se colocaba a ocho puntos: 72-64. Tiempo muerto de Lezkano, y solo 3,14 por jugar.
Kunkel acortó la distancia. Armus sacó la basura y anotó en la siguiente tras una defensa intensa de los palentinos que recuperaron el balón. Desventaja de 4, que se amplió a 7 a falta de 1,38.
Jakovics desperdició una nueva jugada tirando desde su casa y punteado rezando por el milagro que no llegó. Melilla ya jugaba a agotar las posesiones. Iba a ser su primera victoria y la primera derrota del Súper Agropal Palencia.
El intento del Palencia por acercarse fue en vano con su desastroso acierto en tiros de tres.
Al final, 80-75 con el triple de Vrankic cuando los tableros se iluminaron
Los morados, a un continente de distancia de su juego y acierto, cosechan su primera derrota en la casa del penúltimo de la clasificación. En sus estadísticas un 7 de 42 (16%) en tiros de tres; un 29 de 83 en tiros de campo y un 7 de 20 en libres.
Próximo encuentro, en Palencia, ante el HLA Alicante, este viernes a partir de las 21 horas.
Entre los palentinos, el MVP, Armus gracias a sus 10 rebotes y 7 puntos. El máximo anotador morado, Kunkel, con solo 13. El jugador con mejor +/- Ugochukwu , con +10. El que peor balance presentó, Armus con -15.



















