El partido, que se disputará en el nuevo Palacio de los Deportes de Oviedo a partir de las 19,30 horas de mañana, debe servir al equipo morado para “para coger el ritmo de juego que nos va a hacer falta ya”
El Oviedo Club Baloncesto -el Alimerka Oviedo-, está crecido. Lo está en lo institucional y en lo deportivo. En lo primero con la mejora de su presencia en la ciudad, ganando masa social. Un aspecto que va de la mano del escenario del que será el último partido de pretemporada para el Súper Agropal Palencia. Porque Oviedo ya no es sinónimo de un partido en un pabellón que aquí en Palencia sería el equivalente al del Campo de la Juventud con gradas supletorias.
El OCB ha estrenado nueva casa, más acorde a la intensidad de su afición, a la que poco se le puede reprochar en cuanto animación de su equipo. Ahora se juega en el Palacio de los Deportes de Oviedo, con una capacidad superior a la del Pabellón Municipal de Palencia: casi 5.400, de las que 750 pueden ser recogidas mediante unas gradas rectráctiles, dependiendo del tipo de disciplina deportiva que se practique.
Ahora, en pretemporada han llegado a meter hasta 2.000 personas en partidos en los que han vencido equipos a priori superiores, como el San Pablo Burgos y el Obradoiro (de ahí que también tengan expectativas crecientes en Oviedo en lo deportivo) y tras una prórroga contra el Alega Cantabria.
En ese escenario es donde el Súper Agropal Palencia de Natxo Lezkano, tendrá que afinar, que apretar las últimas tuercas dado que el Alimerka Oviedo es su último rival antes de comenzar el fin de semana que viene la liga en Mallorca. En concreto, el domingo 28 a las 18 horas. Por cierto, que la plantilla y el cuerpo técnico del OCB conducirá esta temporada vehículos fabricados en Palencia: los Renault Austral.
En cuanto al partido de mañana viernes a las 19,30 horas, según Lezkano, el resultado, como en todo partido de pretemporada “quizás es un poco lo de menos. Nos vamos a fijar en cómo hacemos las cosas, en jugadores que todavía tienen restricciones de minutos, pues tendrán que jugar con ese hándicap e intentar coger el ritmo de juego que nos va a hacer falta ya”.
En cuanto al trabajo desde la derrota ante el Valladolid, Lezkano apuntó a que el equipo “poco a poco encontrando sensaciones. Los jugadores que han estado fuera por diversos motivos, sobre todo problemas físicos, pues cada vez encontramos un poquito mejor y bueno, cogiendo las cosas a nivel táctico que todavía no están del todo bien”.
