El conjunto morado con un ritmo muy alto, una presión intensa y bajo la batuta de Wintering, se deshizo de un Alega Cantabria que se hundió en el segundo cuarto (58-107)
Los palentinos somos mucho de subir a Cantabria. A cambiar de aires. A bañarnos en la playa. No hace ya para bañarse en el Cantábrico, pero hoy el Súper Agropal Palencia subió a Cantabria, a Torrelavega, a darse un baño, de placer, ante el Alega Cantabria.
Había sido la sensación de la segunda jornada de esta aún joven temporada en la Primera FEB. El Alega Cantabria que doblegó al Obradoiro. Y el siguiente al que le tocó en suerte fue al Súper Agropal Palencia que se desplazó hasta Torrelavega acompañado por cientos de aficionados morados gritando eso de Palencia, juegas en casa.
Tocaba hacer eso de no hay dos sin tres. Para ello, Padilla sacó de inicio a Oroz, Borg, Vrankic, Armus y Jakovics.
Empezaron los morados aguijoneando a los cántabros. Rápidos como escorpiones, recogían los balones que fallaban los del Alega para al contraataque ir sacando rédito. Rebote igual a canasta rápida y fácil 2-12 que hizo a Encinas pedir su primer tiempo muerto. Pérez se estrenó en los locales para delirio del Vicente Trueba. Canasta y en la siguiente jugada, personal sacada a Manu.
En ese momento Padilla dio entrada a Wintering que empezó su magia desde los 4 metros. Pero al Palencia se le había secado la fuente. El Alega cerraba mejor el rebote. Estaba más encima del ataque palentino que necesitaba más claridad. A falta de poco menos de 4 minutos, 10-17 en el marcador.
Alec se encargó de buscar nuevos manantiales. Con triples y asistencias, buscando el juego rápido. 11-25 en tres jugadas. Al final de ese primer cuarto, 11-28.
Segundo cuarto.
Con presión alta les hacían los ataques eternos a los cántabros que tenían que maltirar a la desesperada. Y el rebote, a la casilla visitante, para los palentinos, que estaban rotando como un spinner. Unos minutos en cancha, dándolo todo y al banco. Kunkel se sumó a la fiesta anotadora, Vrankic se atrevió a lanzarse desde el perímetro en penetración cuando se estaba jugando sin pívot. 14-38 consumidos tres minutos y medio.
Tanto luchaba el rebote el Palencia que los árbitros le señalaron una antideportiva a Kamba en la disputa por uno. Y a continuación, técnica a Pérez por protestar una fuera de banda.
Los locales pudieron reaccionar con dos triples seguidos, pero la avalancha palentina (como en verano en las playas cántabras) se dejaba notar en la cancha y en el marcador. Mediado el cuarto, 21-45 y tiempo muerto para Lolo. Los suyos además ya estaban en bonus. su principal apuesta, Pérez, estaba fuera de juego, concediendo tres libres a Borg.
Todo lo contrario que el banderizo palentino, Alec Wintering, que de nuevo hizo, deshizo, dio, regaló y mantuvo a los morados muy por encima del Cantabria. En solo 8 minutos en la cancha ya había anotado 15 puntos (sin fallo), había dado dos asistencias y recogido 4 rebotes.
El cuadro palentino empezó a gustarse y a plantear cosas nuevas, como tener en cancha a Armus y Ugochukwu. La presión era asfixiante en defensa y a los cántabros se les apagó la luz. Al descanso 24-60, con una parcial de 13-32.
Tercer Cuarto
Salió en tromba el cuadro local. No le quedaba otra. Dos canastas seguidas, secando bien el ataque palentino. Desatranques Wintering volvió a dar corriente a la tubería morada. Robando, asistiendo, anotando. Como el que da el grifo de la ducha.
Pérez era de los pocos que daba la réplica a los morados. Con chispazos bien defendido por Borg y Kamba.
Se empleaba en defensa el Súper Agropal para frenar lo poco que ponía el Alega Cantabria. Y se propuso alimentar a Ugochukwu en la pintura cuando el pívot estaba en cancha. Hasta Chema se atrevía con las asistencias, a Vrankic. Todo con un juego muy suelto. 44-80 a falta de dos minutos para cerrar un tercer cuarto muy anotador y hasta en cierto punto loco. Al final del mismo, 48-82.
Último cuarto.
Con un dos más dos en una posesión de Wintering arrancó el último cuarto. Jakovics anotó la siguiente. No de tiro, no estaba acertado, de penetración. Otro recurso.
Perdió disciplina el partido, claridad. Ritmo. Consumidos tres minutos 51-88. Y cuarta de Wintering, por emplearse en demasía en defensa en dos jugadas casi consecutivas, apreciaron los colegiados. Jakovics a cancha, Kamba subiendo el balón… múltiples pruebas para dar con la temperatura exacta. Igual no para el partido de hoy, sino para cuando toque.
Kunkel volvió a colocarse a la zaga de Wintering en anotación. Con el partido roto, tenía posiciones francas para tirar. 52-93 a falta de cuatro minutos. Tiempo muerto de Lolo Encinas. Ninguno consumido por Padilla.
El punto 100 llegó a falta de 3 minutos. Robó Kamba, asistió a Jakovics que, con parsimonia, encestó un triple. La misma parsimonia que ya exhibió el cuadro morado para cerrar un partido finiquitado desde antes del descanso.
Al final, 58-107. El máximo anotador morado, Wintering, con 22 puntos, seguido de Kunkel (21). Como MVP, Wintering, con 28 de valoración. El palentino con mejor +/-, Jakovics, con +41 con él en cancha.
Todo ante una animada hinchada palentina que llenó un fondo y se repartió por el resto del pabellón y que acabó gritando Alega Alega cuando los locales saludaron a su pabellón.
El próximo encuentro de los morados, este próximo viernes ante el Menorca.
