Pepa y Susana han regresado a su tierra para abrir La Finca de la Puebla de Población de Campos, un restaurante de cocina casera y un espacio ajardinado. Su objetivo es convertirlo en un punto de encuentro regional con alojamiento y actividades
Después de años en Madrid, Pepa y Susana decidieron dar un giro a sus vidas y volver a sus orígenes. Lo que comenzó como un sueño se ha materializado en La Finca de la Puebla de Población de Campos, un proyecto que acaba de abrir sus puertas y que promete convertirse en un referente en la comarca.
Las hermanas se marcharon jóvenes a la capital madrileña, donde desarrollaron sus carreras profesionales. Sin embargo, el arraigo por su tierra y el encanto de esta finca, que llevaba dos años cerrada, las impulsó a regresar.
“Siempre nos gustó este lugar, y cuando surgió la oportunidad no lo dudamos”, explica Pepa. Así, hace apenas unas semanas, inauguraron la primera fase del proyecto, un restaurante de cocina casera y una amplia zona ajardinada ideal para disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. Uno de los grandes fuertes de La Finca de la Puebla es su cocina casera con sus guisos tradicionales a la cabeza.
Además se ofrece Menú del día siendo el viernes el día del cocido como plato estrella, mientras que los fines de semana la reina es la carta con su variedad. Destacan platos como las croquetas caseras de espinacas, gambón o chipirones o los pimientos del piquillo rellenos de bacalao.
No pasa desapercibida la gran terraza-jardín, un espacio verde que en verano será uno de los mayores atractivos. Además la finca conserva un gran icono que atrae a visitantes, una escultura de una mano de grandes proporciones y fotografiada por numerosos peregrinos y viajeros.
Aunque Susana y Pepa reconocen que las primeras semanas han sido intensas con “mucho cansancio, pero mucha ilusión”, están convencidas de que La Finca de la Puebla se convertirá en un punto de encuentro para la zona.
Tanto es así que ya están trabajando en acondicionar la zona del albergue con el fin de poder ponerlo en marcha en septiembre. De esta forma se ampliarán las plazas de las 30 que había inicialmente a un total de 150, dirigidas a grupos escolares, peregrinos y eventos. Además, también se reformará un pabellón multifuncional para poder llevar a cabo en él celebraciones. Todo ello se completará con una piscina exterior pensada para los huéspedes.
“El sitio es espectacular, y este verano la gente podrá venir a comer o tomar algo en el jardín. Queremos que se convierta en un sitio de referencia para toda la zona”, concluyen.
