La directora general de Vivienda de la Junta, María Pardo, destaca la rapidez de las ayudas autonómicas a las viviendas y su cuantía (hasta 203.000 euros) frente a las «irrisorias» del Estado «de 17.000 euros en el mejor de los casos»
La directora general de Vivienda de la Junta de Castilla y León, María Pardo Álvarez, puso de manifiesto hoy en su segunda visita a San Pedro de Cansoles, un mes después del incendio que arrasó la localidad, que la «intención, propósito y compromiso» del Gobierno regional es «devolver a esta localidad, a este pueblo, a este lugar, exactamente a la situación que tenía previa al incendio».
Acompañada por el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, y el delegado territorial de la Junta en Palencia, José Antonio Rubio, Pardo destacó tanto la rapidez de las ayudas de la Junta a los propietarios de viviendas ocupadas como la cuantía. «Nos comprometimos a subvencionar con hasta 185.000 euros por vivienda y otros 18.000 por enseres, eso suma un total de 203.000 euros en caso de ruina total, en caso de ruina parcial prácticamente es lo mismo porque son 193.000 euros y por supuesto la retirada de escombros que es gratuita para los afectados». Cantidades que en el caso de San Pedro de Cansoles, pedanía de Guardo se ha traducido en que ya se han «aprobado las ayudas para nueve familias y hoy hay ya 1,8 millones de euros aprobados para que esas nueve familias puedan, a través de un anticipo del cien por cien, es decir, sin necesidad de endeudarse, poder contratar las obras de recuperación y de restauración con quien consideren y de la forma que ellos consideren».
Posteriormente, afirmó la directora general, se procurarán ayudas para la recuperación de espacios complementario, pero por ahora se ha querido dar prioridad a las viviendas. «Estas ayudas no tienen cuenta, si son primera residencia o segunda residencia, no tienen en cuenta el nivel de ingresos de las familias porque, insisto, nuestra voluntad no solamente es recuperar el derecho a disfrutar de una vivienda aquellos que la hayan perdido en el caso de que fuera primera vivienda sino también un compromiso con el medio rural y con la recuperación de estas zonas».
De forma paralela a la tramitación de las ayudas se ha procedido al desescombro de las zonas afectadas, sin coste para los propietarios aunque se ha encontrado con problemas como la presencia de uralita y «eso tiene un tratamiento especial, lleva un tiempo especial y eso complica un poco el tiempo». Con todo, Pardo hizo hincapié en la premura de la respuesta de la Junta: Se dictó «una orden de emergencia para la recogida y la retirada de todos los escombros que se habían producido fruto de estos incendios. Hoy lo estamos viendo. Y es que se decretó exactamente el 22 de agosto, o sea, escasamente seis días después de que se declarara el incendio».
«Ojalá en el verano que viene estas viviendas puedan estar ya reconstruidas. Va a depender más de la prisa que se puedan dar los propietarios que de la propia administración», declaró la directora general de Vivienda que agradeció la labor realizada por el Ayuntamiento de Guardo, «porque sin su ayuda lo hubiéramos hecho, pero no lo hubiéramos hecho en este tiempo récord».
Ayudas estatales y crítica a hacienda.
Pardo contrastó el esfuerzo de la Junta mediante estas ayudas frente a la «irrisoria» cantidad que establece el Gobierno Central que pidió que revise. «El Gobierno de España solo concede 17.000 euros en el mejor de los casos y si son familias altamente vulnerables. Entendemos que cuando una persona ha perdido todo, evidentemente con 17.000 euros no puede casi ni contratar las obras de profesionales o los trabajos de profesionales. Por tanto, le insistimos en que por favor revise esas cuantías».
También que esa ayudas no tributen como ya se ha solicitado al Ministerio de Hacienda. «La ministra de Hacienda tiene una carta de nuestro consejero desde el 26 de agosto solicitándola que, por favor, modifique la legislación porque estas ayudas que nosotros concedemos tributan en Renta y, por tanto, esas personas desgraciadamente si no se modifica y se declaran exentas, sin que nosotros podamos hacer absolutamente, nada van a tener el perjuicio de que parte de ese dinero va a ir de forma completamente incomprensible otra vez a la administración pública».
Por su parte, el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, creyó en «la sensibilidad» del Estado para que los afectados no tengan que pagar más impuestos y esto anule su interés por reinvertir en las zonas afectadas y avanzó que, por su parte, el Ayuntamiento de Guardo, va a colaborar con la exención de tributos para las licencias de obras en San Pedro de Cansoles.
Y no solo colaborando de forma pasiva, sino también activa, para recuperar algunas edificaciones y elementos que estaban derruidos ya antes del incendio, con una «conciliación urbana y medioambiental para que quienes quieran hacer la reinversión estén en un entorno agradable».
Otras ayudas.
El delegado de la Junta en Palencia, José Antonio Rubio Mielgo, recordó que además de estas ayudas a la reconstrucción de viviendas afectadas, el gobierno autonómico ha puesto en marcha otras, «que ya se han cobrado» como «los 500 euros para las familias desalojadas» y se han tramitado ayudas de 5.500 euros para las empresas que sufrieron problemas de funcionamiento durante los incendios; se están tramitando los 5.500 euros como mínimo para las pérdidas que han sufrido los ganaderos y los agricultores y apicultores de la zona, que en Palencia tenemos varios» ya además ayer se publicó la convocatoria para reparación de cercados afectados por el fuego.
Igualmente destacó la partida de 125.000 euros para que los ocho ayuntamientos afectados puedan contratar hasta 11 personas dentro del programa Renacel para ayudar a las labores de restauración y reconstrucción.
El delegado resaltó que, desde un primer momento, «la obsesión del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha sido solucionar los problemas que se habían planteado de forma urgente, de forma eficaz y de forma sencilla para los afectados. Yo creo que la Junta se ha volcado en este sentido y lo está consiguiendo».









