La asociación estudia tomar acciones legales tras el incendio en la Montaña Palentina
Ecologistas en Acción Palencia ha emitido un comunicado tras el incendio declarado el pasado 10 de agosto en la Montaña Palentina, para exigir una revisión de lo ocurrido y depurar sus respectivas responsabilidades. En este sentido, la asociación señala que no descarta emprender acciones legales contra los responsables del desastre ambiental.
El colectivo destaca en su comunicado que la avería del helicóptero con base en Villaeles de Valdavia (Palencia), el único operativo en la provincia, obligó a recurrir al aparato desplazado desde Medina de Pomar (Burgos), que no pudo intervenir con eficacia en su llegada a la vista de lo ocurrido. A su juicio, la antigüedad y las horas de trabajo de este medio hacían previsible una incidencia de este tipo, lo que pone de relieve la falta de alternativas para una zona como la Montaña Palentina. Por ello, reclama investigar las condiciones del contrato del helicóptero destinado a Palencia.
La organización ecologista también responsabiliza a las políticas de la Junta de Castilla y León, a las que atribuye el debilitamiento del operativo público de incendios. En esta línea, denuncia la precariedad de las cuadrillas de tierra, contratadas por empresas «que resultan agraciadas de manera ventajosa con el dinero público que reparte la Consejería de Medio Ambiente y que no llega a los que combaten las llamas», y plantea reforzar este dispositivo con equipos profesionales y brigadas helitransportadas autonómicas, preparadas para intervenir durante todo el año.
El comunicado destaca además la falta de respuesta institucional en las primeras horas, en contraste con la colaboración de la sociedad civil y los voluntarios, y reconoce la labor del alcalde de Cervera de Pisuerga, Jorge Ibáñez.
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Por último, Ecologistas en Acción advierte sobre la inminente apertura de la temporada de caza en la Reserva Regional de Fuentes Carrionas, donde se ha quemado terreno: «Matar ciervos, rebecos y jabalíes en la zona quemada además de ilegal parece una aberración y, en lo colindante con lo quemado, un auténtico atentado ecológico», concluyen.
