El colectivo asegura que la movilización fue una decisión colectiva surgida durante una concentración contra las pantallas ferroviarias y las obras del “salto del carnero” y denuncia la situación que viven desde hace más de un año.
Los vecinos del Camino Viejo de Husillos han hecho público un comunicado en el que explican y defienden su actuación tras los hechos ocurridos en la tarde del jueves, durante una protesta relacionada con las obras ferroviarias que se desarrollan en la ciudad de Palencia.
Según relatan, los acontecimientos se produjeron mientras participaban de forma pacífica en una concentración convocada por la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palencia (FAVPA) en contra de la instalación de pantallas, a favor del soterramiento y en rechazo a las obras que califican de ilegales por parte de ADIF, conocidas como el “salto del carnero”. Durante el encuentro, afirman que surgieron comentarios entre los asistentes planteando la necesidad de llevar las protestas a la estación de tren para que sus reivindicaciones tuvieran mayor repercusión.
Tras la intervención de la presidenta de la Federación, los vecinos del Camino Viejo de Husillos solicitaron el turno de palabra y, según explican, decidieron acudir a la estación de trenes para protestar, una acción que aseguran no fue dirigida ni organizada por ningún partido político ni entidad concreta. “No hemos llevado a nadie de la mano”, señalan, indicando que en la protesta participaron vecinos, representantes asociativos y ciudadanos en general.
En el comunicado, el colectivo agradece la actuación de las fuerzas del orden, destacando que su intervención contribuyó a calmar la situación y que incluso se les permitió expresar su malestar a un grupo de vecinos encabezado por la presidenta de la FAVPA. No obstante, también manifiestan su incomprensión por el hecho de que, según indican, no se esté paralizando una obra declarada ilegal, ni se estén solicitando los permisos correspondientes de ocupación de la vía pública.
Los vecinos denuncian además la situación actual del barrio, afirmando que hay camiones ocupando la vía pública, que personas mayores y enfermas no pueden salir de sus viviendas por el barro acumulado y que algunos residentes han optado por abandonar sus casas al no poder vivir “en condiciones dignas”. En este contexto, muestran su preocupación por el futuro del barrio y hacen referencia al impacto que, a su juicio, podrían tener las obras en la actividad económica de la zona.
Aunque reconocen que no se sienten orgullosos de lo ocurrido, aseguran que no están arrepentidos, argumentando que su protesta causó molestias durante apenas media hora frente a los más de dieciocho meses que, según indican, llevan soportando las consecuencias de las obras. El comunicado concluye agradeciendo el apoyo recibido por parte de los asistentes y reafirmando su intención de continuar con las reivindicaciones.
El texto está firmado por los Vecinos del Camino Viejo de Husillos, quienes cierran el comunicado con un mensaje de agradecimiento a la ciudadanía palentina por el respaldo mostrado.




