Maite Delgado Torío
Inmobiliaria de la Rúa es una empresa familiar con raíces desde el año 2000. ¿Cómo influye ese carácter familiar en la relación con el cliente y en la gestión del día a día, comparado con una gran cadena inmobiliaria?
Como tú dices, esta es una empresa familiar. El contacto con los clientes es mucho más cercano. No es tan frío como una gran empresa, tipo franquicia, que los trabajadores hoy están, mañana no. Es una maravilla tener clientes, hoy amigos, de hace años, que se pasan por la oficina para saludarte o para echar una parlada.
Lleváis más de 15 años como referencia en Palencia. ¿Cuál ha sido el cambio más significativo que habéis visto en el mercado inmobiliario de la provincia en estas dos décadas, y cómo os habéis adaptado a él?
Empezamos en plena crisis financiera de 2008, muy complicado. Conseguir hipoteca resultaba bastante difícil, gracias a los bancos que confiaron sus inmuebles en nosotros conseguimos un mercado muy amplio por toda Castilla y León. Trabajamos mucho, recorrimos desde las cercanías de Burgos hasta el sur de Salamanca. Tenemos una cartera muy amplia de viviendas, locales y naves de los bancos.
Poco a poco, luego los bancos se abrieron más a conceder hipotecas. En estos últimos años, hemos tenido altibajos.
No solo os limitáis a poner en contacto a comprador y vendedor, sino que os encargáis de tramitaciones legales y comerciales. Para alguien que nunca ha comprado o vendido, ¿qué parte de esos servicios agilizan más el proceso y alivia más la carga al cliente?
El proceso de la compraventa de un inmueble es bastante complejo. Hay personas que lo tienen claro y saben los pasos a seguir. Otras están bastante perdidas. A estas personas hay que explicarles los pasos que hay que seguir y decirles que no se preocupen, que nosotros nos encargamos de todo el proceso.
Ofrecéis asesoramiento en préstamos hipotecarios y análisis financiero. En un contexto de tipos de interés variables, ¿cuál es el consejo más valioso que soléis dar a los compradores primerizos que acuden a ustedes?
Aconsejamos primero que consulte con el banco con el que habitualmente trabaja. También que vean si les puede interesar una hipoteca tipo variable o tipo fija. Es muy importante aconsejar al comprador de su primera vivienda, sobre todo si es gente muy joven. Siempre aconsejamos que lo tengan muy claro y estén seguros de si es la vivienda que necesitan.
Destacáis que el acompañamiento no termina con la entrega de llaves. ¿Qué tipo de consultas o necesidades posteriores son las más comunes por las que los clientes vuelven a contactarles?
Por supuesto, entregar las llaves y salir de la notaría no significa que la operación esté completa. Requiere un tiempo con las diferentes administraciones. Como, por ejemplo, tramitar plusvalías, transmisiones patrimoniales, las altas o cambios de luz, gas, en recibos de la vivienda… Todo ello es necesario para que las partes, tanto el vendedor como el comprador, tengan resuelto todo para asegurarse una compraventa segura. De todos estos trámites nos encargamos nosotros.
¿Ha cambiado mucho el perfil del cliente con la digitalización? ¿Siguen siendo las recomendaciones personales y el conocimiento del terreno vuestras principales fortalezas, incluso en la era digital?
Recuerdo los principios. El cliente de entonces contactaba más desde la oficina directamente, aunque trabajábamos con alguna plataforma inmobiliaria. Recuerdo los días en la oficina llena de personas. Era un local bastante pequeño, por eso decidimos cambiarnos a otro más amplio y más cómodo.
Todo esto ha cambiado mucho. Hoy se trabaja de manera distinta, aunque se sigue trabajando directamente desde la oficina y personalmente. Hoy imperan los medios digitales como internet, portales inmobiliarios o redes sociales. También hacemos un tour virtual de las viviendas. Esto es una guía para que el cliente tenga información de lo que está buscando. Todo esto es necesario hoy día, pero lo más importante es el reconocimiento real, lo que llamamos las visitas en persona. En éstas el cliente se encuentra con la realidad, en ellas verán las ventajas y defectos de la vivienda.
Mirando hacia el futuro, ¿cuáles son los principales retos y oportunidades que veis para el sector inmobiliario en Palencia de cara a los próximos años?
Como es sabido, España es uno de los países europeos con la mayor tasa de propietarios de vivienda. Por eso somos optimistas. Siempre habrá personas que quieran acceder a su primera vivienda, más aún cuando el alquiler está pasando por un mal momento. En muy poco tiempo hemos pasado en Palencia, como en otras ciudades, a un cambio radical en el tema del alquiler. Apenas hay ofertas de viviendas en alquiler. La gente lo demanda y no entiende la escasez de este tipo de vivienda.
Nos preocupan bastante las noticias diarias que dan en los informativos sobre la vivienda. Siempre se refieren a las grandes ciudades, que son las que más problemas han tenido siempre, pero que repercuten siempre en las pequeñas ciudades.
En cuanto a proyectos, siempre tenemos ideas para mejorar, como, por ejemplo, contratar a algunas personas para que nos ayuden en la oficina. En lo demás, siempre estamos innovando. Como es natural, en este sector es muy competitivo.
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