Alejandro Liébana

Recuperar la confianza en nuestra sonrisa es fundamental para el autoestima y bienestar, y la odontología estética ofrece soluciones efectivas y duraderas como las carillas y las fundas dentales

Desde la Clínica Dental Alejandro Liébana explican que estos tratamientos han revolucionado la forma en que se pueden corregir defectos en la apariencia dental, brindando una sonrisa natural y radiante

¿Cuáles son las diferencias entre las carillas y las fundas dentales?
La principal diferencia es que la carilla se coloca en la cara frontal del diente. La funda o corona, como su nombre indica, cubre la totalidad de la pieza dental.
La carilla se utiliza fundamentalmente para tratar problemas estéticos. La corona además de tratar problemas estéticos da solución a problemas funcionales y refuerza un diente dañado. En ocasiones la carilla puede ser colocada sin “tallado dental” mientras que para posicionar correctamente la corona siempre hace falta un tallado o preparación dental antes de su cementación.

¿Cómo se decide qué tratamiento es el más adecuado para cada paciente?
Las carillas se usan cuando se quiere mejorar el color de los dientes, ocultar una fractura del esmalte o dar una apariencia regular y uniforme a todas las piezas.
En el caso de que existan diastemas, es decir, separaciones entre dos dientes, se pueden utilizar para cubrir el espacio, así como para cambiar el tamaño o forma de los dientes.
Y es que las carillas son láminas muy delgadas, de menos de un milímetro de espesor. Se colocan directamente sobre los dientes y se adhieren muy firmemente mediante una resina. Pueden ser de porcelana, que son muy duraderas y no pierden el brillo. También se realizan en composite, que es más poroso y, por ello, se puede decolorar con el paso del tiempo.
Por otro lado, el tratamiento con corona o funda, además de brindar una mejor apariencia, a diferencia de las carillas se utilizan para reconstruir o proteger los dientes y recuperar su función. Se trata de prótesis de algunos milímetros de espesor que se fijan sobre la pieza dental para darle la forma, color y tamaño adecuados.
Éstas se usan después de endodoncias, cuando el tratamiento para eliminar una caries ha causado una pérdida importante de tejido o cuando hay una fractura considerable.
Para colocar la corona se debe tallar el diente sobre el que se va a ubicar. Luego se cementa al colocarla para lograr una unión muy firme.

Y sobre el proceso de colocación ¿es muy diferente el uno del otro?
Las coronas requieren menos tiempo dado que al ser estructuras completas rodeando toda la pieza no requieren un posicionamiento especial, al contrario que las carillas pues estas solo tienen un apoyo, y si no estabilizas bien pueden quedar rotadas.

¿Tienen un tiempo de vida las carillas y fundas dentales tras el cual es necesario cambiarlas?
Tanto las carillas como las fundas tienen un acabado gengival, y según pasa el tiempo ese acabado puede ir variando. Cuándo debe ser cambiada o sustituida lo decidiremos nosotros cuando veamos que se pierde su estética y funcionalidad.

¿Qué precauciones debe tomar una persona que las use?
Las precauciones deben de ser las mismas que tendríamos con nuestros propios dientes, pero sí que es cierto que quizá con las carillas deberíamos de ser un poco más cuidadosos y es recomendable la utilización de férulas de descarga para evitar fracturas.

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