Toman parte de una Coordinadora Internacional que ha sido recibida por el embajador español en la Unesco, Miguel Iceta

Una delegación de catorce alfombristas de la Coordinadora Internacional de Entidades de Alfombristas de Arte Efímero -CIDAE- han viajado a París el día en que la candidatura de las alfombras de flores se presenta a la UNESCO para ser evaluada en los próximos meses. Los alfombristas, en representación de las asociaciones de Malta, Italia, Bélgica y España,  han sido recibidos por el embajador español en la UNESCO, Miguel Iceta.

Palencia está presente en esta candidatura a  través de la la Asociación de Alfombristas de Carrión de los Condes, al estar integrada en la Coordinadora Internacional de Entidades de Alfombristas de Arte Efimero-CIDAE. Para la presidenta de la asociación carrionesa, Eva de la Parra, ha sido un honor  el haber trabajado durante este tiempo en los tramites de presentación del expediente.

El gobierno español ha enviado oficialmente la candidatura y los alfombristas internacionales han querido agradecer el trabajo que se ha hecho desde el Ministerio de Cultura de Madrid para redactar una candidatura compleja, promovida por CIDAE, con cinco países implicados: Bélgica, España, Italia, Malta y México.

El embajador español,  señor Iceta les ha ratificado el convencimiento de que la candidatura alcanza con creces los valores que la UNESCO considera relevantes para incorporar un nuevo elemento a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Los alfombras han compartido también el almuerzo con el embajador español y han realizado una visita por los espacios de la sede de la UNESCO, que atesoran obras de arte de Joan Miró, Pablo Picasso, Alexander Calder, Henry Moore y Alberto Giacometti, entre otros .

Han sido cuatro años de trabajo intenso y reflexión sobre los valores que tiene el arte de alfombras de flores, como un patrimonio cultural inmaterial. Para los alfombristas de CIDAE que viajan por todo el mundo mostrando la calidad de sus obras, llegar a la UNESCO significa un reconocimiento a su perseverancia por mejorar formando parte de una gran familia de alfombras de trece países en tres continentes.

Ahora habrá que esperar hasta diciembre de 2025 para poder celebrar la inscripción de “El arte de hacer alfombras de flores” en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, un tiempo necesario para estudiar y valorar la candidatura.

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