Dos agentes de la Policía Local de Palencia, comprueban la documentación de un conductor en un control en la ciudad. / Óscar Herrero

Dos usuarios de patinetes eléctricos fueron interceptados por la Policía Local con resultados positivos en alcoholemia y drogas

Hay calles de Palencia anchas. Con carriles generosos en los que un conductor ebrio puede disimular su estado. Se le puede ir el coche, pero casi sin salirse del carril. Pero hay otras vías en la ciudad en las que hasta los ojos inexpertos de un ciudadano común puede advertir que algo no va bien en quien lleva el coche que acaba de ver pasar.

Y una de esas calles es la Calle Mayor Antigua. Estrecha en la mayor parte de su recorrido, angosta en varios puntos donde aún lado está el bordillo y al otro coches aparcados casi sin margen para el más mínimo error. Y desde de esta calle, los agentes de la Policía Local recibieron, a través de Emergencias 112, el aviso de que un conductor circulaba, en la madrugada del sábado “con su vehículo en estado ebrio”.

Poco después del aviso, con los datos facilitados y las evidencias a la vista, los agentes lograron localizar al conductor, al que sometieron a la prueba de alcoholemia. El resultado fue de 0,99 mg de alcohol por cada litro de aire expirado, cuando la tasa máxima para un conductor se sitúa en 0,25. Es decir, cuatro veces menos de lo que presentaba el conductor en cuestión que fue denunciado por un presunto delito contra la seguridad del tráfico.

En patinete también se sopla

Superior fue la tasa con la que los agentes de la Policía Local dieron el alto al conductor de un vehículo de movilidad personal en la tarde-noche del sábado en el Paseo de San José. Allí, el conductor del mismo, de 45 años, arroja un resultado de 1,07 mg/l. Sin embargo, al no considerarse una vehículo a motor, no se le puede acusar de un presunto delito contra la seguridad del tráfico, como ratificaron desde la Policía Local de Palencia a Palencia en la Red.

Otro conductor de un vehículo de este tipo fue también el protagonista de otra sanción en este caso por varias razones.

Puesto que se trataba de un menor de edad, manejando un vehículo de estas características por una zona peatonal de la avenida Reyes Católicos -cuando debe hacerlo por la calzada- y haciendo uso de unos auriculares.

Además, cuando los agentes lo pararon sospecharon de su estado, por lo que le sometieron a la prueba de detección de drogas en la que dio positivo en TDC. Se cursaron las denuncias administrativas oportunas. En los tres casos, el vehículo fue retirado al depósito municipal.

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