Espacios amables para los usuarios y tres zonas diferenciadas en una sola planta
Mucho se ha hablado de la Unidad Satélite de Radio Terapia de Palencia que la Junta de Castilla y León. Especialmente en lo referido a lo que han tardado en darse los primeros pasos para lograr que Palencia deje de ser una de las pocas provincias que carece de este equipamiento de tratamiento oncológico, lo que hace que los pacientes, generalmente en estado delicado, tengan que desplazarse a Valladolid o a Burgos a recibir tratamiento de radioterapia.
Hace unos meses comenzaron a llegar las promesas. Se fue actuando en la parcela en la que se instalará, en el camino Viejo de Villamuriel de Cerrato, junto al aparcamiento actual del Hospital, pero una vez quedó expedita la parcela, el proyecto se enfrió un poco.
Hasta hace unas semanas en las que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, visitó las obras del Bloque Técnico del Río Carrión y anunció que la Unidad de Radio Terapia volvía a ponerse en marcha. Será el Somacyl el que se encargará de ejecutarla, por un presupuesto total de 5,71 millones de euros y un plazo de ejecución de 18 meses, desde que el Somacyl contrate o comience a ejecutar las obras.
Pero ¿cómo será esa unida de radioterapia de Palencia?. En los datos técnicos tendrá una superficie útil de 695 metros cuadrados, distribuidos en tres grandes bloques que permiten definir claramente una zona pública, zona de atención y de tratamiento y, por último, el área de trabajo para los profesionales, si bien la superficie construida alcanzará los 1.300 metros y la urbanizada estará en torno a los 3.800, contando los jardines.
La Unidad Satélite de Radioterapia de Palencia tendrá un espacio de tratamiento con dos búnkeres, una sala de control con dos puestos, dos salas de preparación y recuperación y una sala de espera. Todo ello en un ambiente luminoso.
El edificio se materializa como un volumen sencillo de hormigón de diferentes texturas, que se protege de las visuales exteriores para crear un rico y cuidado mundo interior”, recoge la memoria del proyecto, elaborada por TCUArquitectos y cuya propuesta encabeza esta información.
En el interior.
“En oposición a esta rotunda imagen exterior, el interior del edificio ofrece un lugar de refugio para el usuario. Una diversidad de espacios luminosos – en forma de patios ajardinados – ordenan y configuran el espacio interior introduciendo una complejidad de perspectivas y luz en el interior. Por último, un gran vacío construye la principal área del proyecto, un espacio pensado para el paciente. Un amplio recibidor diáfano que, caracterizado por la luz, configura la llegada y el acceso al edificio. Su configuración y posición lo convierten en un amplio espacio polivalente, luminoso y versátil, en directa relación con el exterior y la urbanización propuesta”, propone el estudio arquitectónico vallisoletano.
Todo esto para generar tres espacios diferenciados: una zona pública, de recepción, una semi publica de atención y tratamiento y una privada.
La configuración del edificio colocará la portada de acceso en el vial perpendicular al Camino Viejo de Villamuriel, ubicando la zona ajardinada en frontal que se verá desde la carretera. La fachada que dé a esta zona será en realidad las ventanas de cinco consultas y dos patios, además de una salida de emergencia.
Por pasillos
La Unidad de Radioterapia de Palencia, siguiendo el ejemplo del Bloque Técnico del Río Carrión estará organizada por pasillos en una sola planta. Desde el acceso en la perpendicular al Camino Viejo de Villamuriel, los pacientes se encontrarán una amplia zona de recepción, precedida por un pórtico.
Esta zona de recepción sirve como pasillo de interconexión entre los diferentes pasillos de la zona de atención médica, que de derecha a izquierda (de la carretera al fondo de la parcela, lindando con Repsol) se distribuyen en zona de consultas, zona de planificación, zona de preparación y simulación. Esta dispondrá de una sala de 30 metros cuadrados para realizar los procedimientos, con dos puestos de control y un almacén técnico, así como cabina para pacientes. La zona destinada a planificación contará con un despacho para radiofísico, sala de trabajo de dosimetría, sala de moldes y almacén de material.
Y a la izquierda del todo, los dos bunkers donde se aplicarán los tratamientos.
El acceso principal se sitúa en el amplio recibidor diáfano que conforma la zona pública. Una vez en el interior, el espacio se muestra como polivalente y continuo; en el cual se ubica la recepción, las distintas salas de espera y un acceso secundario, más privado, para pacientes que llegan desde la ambulancia. Desde este espacio, y siempre visible desde la recepción, se permite el acceso controlado a los distintos distribuidores que dan acceso a las áreas que configuran el interior – distribución de tratamiento, distribución de simulación y planificación y distribución de consultas – creando, en lo posible, circulaciones sin interferencias y claras para los pacientes”, se define la zona pública.
“Uno de los principales objetivos de nuestro proyecto es el de establecer un orden y claridad en la distribución que desemboque en una gran funcionalidad. Por tanto, dado que, en general, estas piezas responden, cada una de ellas a una unidad o área funcional de las requeridas”, detalla el equipo de arquitectos.
Además, en el interior se buscará luminosidad. Para ello se habilitarán diferentes espacios y patios interiores de carácter vegetal. Además su disposición permitirá un acceso controlado de la luz.
En cuanto a la sostenibilidad de la construcción TCUArquitectos apuesta un edificio “muy compacto, reduciendo lo máximo posible el área de intercambio térmico. Por consiguiente, los diferentes tipos de cerramientos exteriores han de proporcionar una alta eficiencia energética reduciendo al máximo el intercambio térmico con el exterior. Otro de los aspectos tenidos en cuenta en las condiciones de diseño, es la protección pasiva frente al sol.
