Inauguración del Centro de Artes Escénicas Jorge Manrique de Paredes de Nava - Aida Acitores

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, inaugura el Centro de Artes Escénicas Jorge Manrique de Paredes de Nava, un proyecto ambicioso que aspira a ser un revulsivo para toda la provincia

Citando a Jorge Manrique y a Lorca como no podía ser de otra manera, referencias a Pedro y a Alonso Berruguete. La inauguración esta mañana del Centro de Artes Escénicas de Paredes de Nava estaba teñida de ese solemne respeto por la cultura.

Una cultura que, “como digo siempre, nos hace felices”, según expresaba la presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, casi contestando al director general de Patrimonio Cultural y Bellas Artes, Isaac Sastre de Diego, que minutos antes había parafraseado a Umberto Eco sobre el escenario, al afirmar que el nuevo espacio cultural paredeño, consagrado ya para el disfrute de toda la provincia, ponía de manifiesto que el Ayuntamiento palentino “ha sabido hablar el lenguaje de las personas que saben que la cultura es vida, en contraposición a estos tiempos de guerra”.

Palabras elevadas para un día de fiesta y emoción, en el que participaron autoridades como el propio presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; acompañado por los consejeros de Economía y de Agricultura, Carlos Fernández Carriedo y Gerardo Dueñas, y la viceconsejera de Cultura, Mar Sancho; junto con senadores y diputados, alcaldes de toda la provincia, la presidenta y todos los diputados provinciales; autoridades eclesiásticas y de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado… Y junto a esta larga lista, por supuesto, representantes de las principales organizaciones y colectivos culturales de toda la provincia: desde el Museo de Palencia hasta la Fundación Díaz Caneja, pasando por AMGu, Palencia Sonora, las asociaciones de artistas plásticos, escuelas de danza y un largo etcétera.

Una lista de invitados que era en sí misma una declaración de intenciones. Porque este Centro de Artes Escénicas Jorge Manrique, que ha supuesto una inversión (hasta ahora) de más de 2,5 millones de euros financiada con cargo al programa 1,5 % Cultural del Ministerio de Cultura junto con las aportaciones de la Junta, Diputación y el propio Ayuntamiento, ha abierto hoy sus puertas con la aspiración de convertirse en un elemento totalmente disruptivo para la vida cultural de la provincia.

Las palabras del alcalde de Paredes de Nava, Luis Calderón, apuntaban igual de alto. “Este es el primer palacio de Congresos de Palencia”, proclamaba, no sin cierta ironía, tras el largo retraso que lleva la construcción del de la capital.

Un proyecto de cada paredeño

Pero es mucho más que eso. Es una señal de que “las cosas en el mundo rural están cambiando”, según consideraba Calderón en su discurso. Primero, porque la apertura de este espacio es un logro colectivo y popular. “Cada paredeño ha hecho suyo el proyecto”.

Y cada paredeño se ha sacado hoy la espina de ver en la ruina este antiguo Convento de San Francisco, levantado por el conde Manrique en el siglo XV, que tras la Desamortización de Mendizábal pasó a ser propiedad municipal.

A lo largo de los últimos 150 años ha sido colegio, con aulas y casas para los maestros; se ha segregado para albergar el Ayuntamiento. Sus ruinas se han ido restaurando poco a poco con pequeñas subvenciones y planes de empleo, pero no ha sido hasta la llegada del proyecto dirigido por la arquitecta Pilar Diez, que accedió a este programa del Ministerio de Cultura, cuando no se ha cumplido por fin ese sueño de toda la villa.

Y es que no solo todo el pueblo ha apoyado esta importante obra pública (la mayor del último lustro en toda la provincia, según recordó el alcalde), sino que además lleva el sello de los mejores profesionales de la tierra, que han estado a la altura de la magnitud del proyecto.

La arquitecta paredeña Pilar Diez recibía ayer el elogio del público y las autoridades tras firmar una obra “de singular belleza”, según el propio Alfonso Fernández Mañueco, que mantiene “la persistencia de lo que quedaba del convento”, tal y como destacó la propia autora de la obra, que se propuso “recuperar y dar identidad al edificio” pensando en el público y en los diferentes usos profesionales que deberá tener a partir de ahora (“usos flexibles y compatibles”, más allá de la representación de obras de teatro y espectáculos), pero también rescatando “materiales naturales a fin de renaturalizar la arquitectura con un lenguaje contemporáneo”.

Tal era la sorpresa que la visita del auditorio y el resto de espacios producía en los asistentes, que el director de Patrimonio del Ministerio de Cultura, Isaac Sastre, le lanzó a la autora el más grande de los reconocimientos públicos: “pocos pueblos pueden presumir de tener varias personalidades históricas, como Paredes de Nava. Y a esas personalidades históricas habrá que incluir el nombre de la arquitecta y su equipo”. Un equipo también palentino, porque la ejecución de la obra ha corrido a cargo de la empresa Valuarte Conservación de Patrimonio.

La vida del medio rural

Y la reflexión de que la cultura es vida cobra más importancia en el caso del mundo rural. El alcalde recordaba que Paredes de Nava tiene una Oficina de la Repoblación. “Vemos optimismo en el medio rural. Las cosas están cambiando y este centro es una insignia de esa lucha”.

Una lucha que ha permitido que un ayuntamiento de menos de 2.000 habitantes afrontara este magno proyecto, al que además de la complejidad técnica tenía que aportar medio millón de euros, que logró financiar gracias a las tasas que dejan en el municipio los parques eólicos y fotovoltaicos.

“La importancia de las renovables excede a su limpieza: este edificio es sostenible hasta en su financiación”, recordaba Calderón, que ponía de relieve también el trabajo de los técnicos para cumplir los complejos requisitos legales y burocráticos estos años, así como “el consenso político, porque todas las decisiones se han tomado por unanimidad con la oposición”.

Y en esos términos, en defensa de las oportunidades del mundo rural palentino, se expresó también el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quien afirmaba sentirse como en casa, recordando que su padre había nacido en Mazariegos.

Mañueco puso en valor el hecho de que Palencia es la tercera provincia de España con menor tasa de paro y que además acumula 30 meses de descenso interanual, además de la subida de las afiliaciones. Por su parte, Isaac Sastre, que acudía en representación del Ministerio de Cultura, recordaba que los jóvenes palentinos de 18 años han pedido el bono cultural en una proporción mucho mayor que la de otras provincias, situándose entre los primeros de España.

Razones, por tanto, para el optimismo que ponía el alcalde de relieve, y que motivan la ilusión por completar el siguiente proyecto que tiene ante sí el Ayuntamiento paredeño a partir de hoy: dotar de contenido y de sentido este nuevo espacio.

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