El viceconsejero de Agricultura y Ganadería, Juan Pedro Medina. / Brágimo (ICAL)

El viceconsejero de Agricultura y Ganadería apuesta por la rentabilidad, la agricultura 4.0, la digitalización y la defensa del mercado

ICAL

El viceconsejero de Agricultura y Ganadería, Juan Pedro Medina, aseguró que la reforma de la nueva Política Agraria Común (PAC), que entrará en vigor en enero de 2023, está marcada por el “componente verde y el de los lobbies alimentarios y animalistas”, cuya seña de identidad se traduce en “menos fondos, pero con más exigencias y requisitos ambientales, a la vez que baja el ámbito productivo”.

Durante su participación en el Foro ‘PAC 4.0 Horizonte 2027’ en Baltanás, organizado por Promecal Palencia y con el patrocinio de AgroBank, Medina trasladó que “hay mucho revuelo con la nueva reforma” y recordó que se empezó a hablar de la misma con una serie de encuestas en 2017, donde la mayor participación en la misma procedía de grupos ecologistas, es decir, aquellos que “no se juegan nada en el campo, pero opinan mucho”.

Señaló que uno de los objetivos es que haya rentabilidad en las explotaciones, pero “no hay grandes propuestas”, a mayores de otros fines sociales, como la atracción de jóvenes al campo. Apuntó que dicho fenómeno solo se producirá a través de la fórmula de la rentabilidad, algo que es difícil, y de la agricultura 4.0, dijo.

“La fórmula para ser más competitivos, productivos y modernizar el ámbito pasa por la tecnología y la digitalización, al ser una de las claves, junto al mercado, de la mano de la Ley de la Cadena Alimentaria, aquella que dice que no se puede vender por debajo del coste efectivo de producción”, adujo, matizando que, en muchas ocasiones, “es difícil de llevar a cabo, pero está escrito en una ley y hay que desarrollarlo y vigilarlo”, aseveró.

Ecorregímenes

“No nos tienen que distraer con los ecoesquemas, los ecorregímenes y los asuntos verdes, porque tenemos que centrarnos en el mercado y la tecnología. Hasta ahora se ha dado mucha importancia a las ayudas directas, a las del primer pilar, pero el sector profesional debería pedir más fondos al desarrollo rural, porque así se podrán hacer políticas inversoras”, sostuvo Medina. Por ello, recomendó “menos tarifa plana y más apoyo dirigido a los profesionales”.

En ese sentido, Medina subrayó que en Europa “todavía manda la tensión verde”, pero aseguró que ya hay otros grupos que se preguntan en la dirección en la que se marcha, debido a un “planteamiento tan verde y poco productivo”, más si cabe tras las consecuencias de la pandemia, del gas y del futuro, concretó.

Paso a paso

El viceconsejero explicó a los asistentes en el foto que, cuando se presentó el Presupuesto en 2018, se procedió a un recorte para la PAC, la cual no tiene en cuenta la inflación, más si cabe con el panorama actual, lo que se traduce en “menos fondos, más exigencias y requisitos ambientales y una reforma menos productiva”, recalcó.

A pesar de que el ministro de Agricultura, Luis Planas, defienda que se trata de una PAC más justa, Medina descartó esa apreciación, ya que, a su juicio, “se quita a los grandes para dar a los chicos, algo que es una aberración”. Además, se producen otros acontecimientos que marcan la reforma, como la aparición de un nuevo Colegio de Comisarios en 2019 o el surgimiento de otras “ocurrencias” que aprietan más el rumbo, como ocurre con el Pacto Verde Europeo, donde se aboga para que Europa avance de forma climáticamente neutra.

Es decir, una serie de normas y aspectos que obligan a reducir el uso de los fertilizantes y los fitosanitarios; a tener más superficie no productiva y menos uso de agua, enumeró Juan Pedro Medina.

Poco tiempo después, apareció la pandemia del COVID-19, donde el campo “metió los tractores al campo, pero sin dejar de producir”. Un tiempo en el que se demostró que los agricultores y el ganado “no eran los responsables de la contaminación”.

Además, criticó el “olvido” de los fondos extraordinarios, los cuales “no se acuerdan” de la agricultura y de la ganadería, ya que solo se destinarán a este sector el 1,5 por ciento de los fondos Next Generation.

A todo ello sumó la guerra entre Rusia y Ucrania, lo que ha provocado el encarecimiento de materias primas, aumento de costes energéticos y falta de productos. “Se está ante una situación muy compleja, sin embargo, no se observa desde Europa gestos para que cambie, porque siguen con sus planteamientos verdes”, afirmó.

Ley nacional

Por otro lado, el viceconsejero de Agricultura y Ganadería comentó que ayer se aprobó en el Congreso de los Diputados la Ley de desarrollo de la nueva PAC, algo que nunca se había producido, ya que la normativa de esta nueva reforma no desarrolla en detalle todos los requisitos de la nueva Política Agraria Común, así como el sistema de sanciones. A mayores, esa ley se han añadido ciertos elementos.

Y es que se trata de una PAC que nace en un contexto de una “ambición ambiental”, donde el 40 por ciento del presupuesto tiene que ir destinado a medidas en favor del medioambiente, por lo que ironizó al asegurar que el acrónico de Política Agraria Común se puede transformar en “Política Agroambiental” y el aspecto comunitario puede estar en el aire, añadió.

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