Isabel Díaz Ayuso en Valladolid - Elecciones 28M. Miriam Chacón (Ical)

La presidenta de la Comunidad de Madrid asegura que las elecciones autonómicas y municipales son una “gran oportunidad de cambiar todo”

La presidenta de la Comunidad de Madrid y del PP de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, aseguró hoy en Valladolid que del socialismo, “se sale”, y se verá próximamente al precisar que la gente no se deja comprar por los chequevotos a los jóvenes de Pedro Sánchez ni se gobierna repartiendo miserias, según informa la agencia Ical.

Por ello, subrayó la importancia del 28 de mayo al recordar que “todo” tiene que empezar en las elecciones autonómicas y municipales para que sea el “principio del cambio” de lo que vendrá con Alberto Núñez Feijóo y el Partido Popular. “Ha llegado el momento de cambiar las cosas y hacer las cosas de una manera muy distinta. Tenemos una gran oportunidad para cambiar todo ya y esto empieza por las ciudades y todos los municipios”, aseveró.

Con motivo de una comida con afiliados del PP de Valladolid, en el que estuvieron presentes el presidente de la Junta y del Partido Popular de Castilla y León; el presidente de la Diputación, Conrado Íscar, y el candidato a la Alcaldía de la capital, Jesús Julio Carnero, aseguró que la urna es una “alternativa” en la democracia para que el PP una, de nuevo, a los ciudadanos “de bien” para que sean respetados.

“No vale votar en contra, hay que votar a favor, con alegría, pasión y alta participación así como vencer con ganas, de manera rotunda para que esta pesadilla llegue a su fin”, sentenció. Y es que reiteró que “la España real nos está mirando y no se deja comprar. Nos están arruinando desde que llegaron a las instituciones por la puerta de atrás”.

Díaz Ayuso cargó contra el presidente del Gobierno por tratar de comprar a los jóvenes y regalarles “todo” como el bono cultural o el Interrail -tras el anuncio de Sánchez de ofrecer el 50 por ciento de descuento este verano-.

“No se compra a los españoles ni a la juventud, por que tiene más dignidad de lo que usted cree. La gente de Castilla no va permitir seguir comprando esta mercancía barata y averiada, que solo trae pobreza y miseria donde se aplica”, le espetó a Sánchez.

A su juicio y según recogió la Agencia Ical, los jóvenes son libres y capaces y no quieren ser dependientes del “cortijo socialista”, como ocurrió 40 años en Andalucía. Se mostró partidaria de ayudar a los jóvenes para que salgan adelante pero dándoles oportunidades como una educación y un empleo de calidad tras señalar que España lidera el desempleo juvenil y la tasa de abandono escolar en Europa. Pero también ayudarles para superar sus problemas de soledad y adicción a nuevas tecnologías. “No saben gobernar, solo reparten dinero por que no lo gestionan bien”, añadió.

La presidenta madrileña consideró que no son tiempos de seguir con los enfrentamientos ni diferenciar entre el rico y el pobre, la derecha o la izquierda, el hombre o la mujer y el campo o la ciudad. Tampoco trasladar la desilusión a España por que no se lo merecen los españoles. Por el contrario, animó a los numerosos afiliados que acudieron a un céntrico restaurante de la capital a trabajar para el 28 de mayo de forma generosa, abierta, desde el corazón y con la cabeza para trasladar a la ciudadanía de que hay una gran oportunidad para cambiar “todo”.

Ayuso apuntó que el PP no es un partido que reviente actos de otras formaciones, provoque a sus simpatizantes o colarse en los lugares donde no son invitados. “Solo queremos unir a todos los ciudadanos, que elijan lo que quieran para sus vidas, pero que sean respetados”, expresó.

Isabel Díaz Ayuso también criticó, según Ical, la nueva ley de vivienda, impulsada por Bildu, que pretende fijar al propietario el precio del alquiler de una vivienda o subir los impuestos, además de incentivar la ‘okupación’. “Cada vez que alguien decida quedarse con el piso de otra persona, va estar blindada, a poco que utilice cuatro trucos. La ‘okupación’ es un delito y que el presidente del Gobierno promueva este tipo de delitos, como tantos otros, es un abuso de poder intolerable, al que no estamos acostumbrados. Van de escándalo en escándalo, hasta tenernos totalmente confundidos”, significó.

Tampoco se olvidó de la memoria histórica, el apagado de escaparates, la intervención de los precios de los alimentos, las trabas regulatorias para “todo” para que la gente no emprenda o entregar la Fiscalía General del Estado a ciudadanos “con carné”. “El Gobierno ha llegado a todos los rincones de nuestras vidas, a decir cómo tenemos que comer, consumir, tratar a nuestras mascotas y pedir perdón por todo y que todo el mundo esté ofendido.

Es muy fácil y cobarde encontrar las diferencias, lo inteligente y lo leal en España es buscar lo que nos une y buscar soluciones”, comentó. En su opinión, este proceso de “degeneración” no lo ha pedido ni votado nada y el Gobierno central busca, por la entrada de atrás, cambiar el país “a marchas forzadas” para llevarlo a un “extremo” para que todo sea “ingobernable”, además de que la sociedad esté más “adormecida”, “anestesiada” y “empobrecida”.

“Venga ya, se ha acabado”

Hizo referencia a que antes la izquierda era entendida antes como el reparto equitativo de riqueza, una justicia, una pretendida igualdad, no dejar a nadie atrás. “Pero nada de lo que vemos, va por ese camino. Han utilizado a la gente para hacer lo contrario con sus políticas. Hablan a la gente de repartir su beneficio, el que se ha ganado honradamente, y así vivir de los demás. Venga ya, se ha acabado”, espetó, entre aplausos del público asistente.

También, criticó a los sindicatos por dar un Primero de mayo “bochornoso”, que anunciaron un otoño “caliente” con manifestaciones. “¿Ahora? ¿Cuántos años más tarde, cuando han protestado los agricultores, los comerciantes y los autónomos y nadie se ha puesto de su lado?”, se preguntó.

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