Zahara Palencia Sonora 2022 Foto Noemi Rías Bascuñana
Zahara. Foto Noemi Rías Bascuñana

Zahara presenta en Palencia Sonora 2022 su gira La Puta Rave, la continuación de un proyecto musical no exento de polémica que le ha hecho merecedora de seis premios MIN

Zahara presenta en Palencia su gira La Puta Rave, una evolución de su proyecto ‘Puta’ que ha supuesto toda una sacudida social por la fuerza de su mensaje, con su correspondiente dosis de polémica y ruido en las redes.

Un disco en el que la cantante jienense se sacudía el dolor de un pasado marcado por el bulling y el abuso sexual y psicológico. Pero además de ello, Puta ha recibido el calor del público y el aplauso de la crítica, algo que anima a Zahara a celebrar sobre el escenario el peso que se quita de encima al compartir, proclamar y liberar tanto.

Si los avances del feminismo se miden en olas, podríamos decir que ‘Puta’ fue todo un temporal de titulares y mensajes de apoyo, frente a la gran “resaca” de la reacción conservadora. Tras estos meses de vuelta a la calma y con el aval de seis premios de la Música Independiente, ¿tu música espumea más tranquila en la orilla? ¿Cómo estás?

Ahora justo estoy en un momento de calma, sí. Ha sido muy intenso, con momentos de luz, pero también durísimos. Exponer los traumas de mi vida de una forma tan clara ha sido liberador, me he quitado de encima un peso con el que acarreaba y ahora me siento muy ligera en muchos sentidos. También tuve momentos muy duros, de miedo, de no querer salir a tocar, de pensar, “uy, por qué hago esto, qué necesidad…” pero siempre encontraba las razones, estaban ahí, delante, todo el rato; por desgracia las mismas que me llevaron a escribir estas canciones.

En esta parte de la gira donde tocamos canciones del disco bajo el marco de la PUTA RAVE me siento mucho más relajada a un nivel emocional aunque mucho más intensa físicamente. Siento que con la Puta Gira solté todo lo que tenía y que ahora es un momento de relajarse y vivirlo desde la belleza que ha traído liberarme.

La tormenta política en torno al cartel del concierto en Toledo te hizo sentir “manoseada”, según expresaste en prensa, pero vemos que en ningún caso te ha amedrentado: acabas de lanzar tu nuevo single ‘La Hostia de Dios’, en la que lamentas que “los viejos mecanismos siempre están ahí”. Ahora, además, tienen el refuerzo de ese “buenismo” que se incomoda ante el espíritu crítico…

Espero no amedrentarme nunca. Es lo que quieren, ¿no? Que nos callemos, que no molestemos, que seamos parte del decorado, como dices, no incomodar… Pero es que creo que ya estamos cansadas. Yo ya no puedo más.

Te soy sincera, hay momentos que digo, por qué. Podría callarme, dejar de decir lo que pienso, dejar de expresarme, pero no es más que el bulling que sufrí de niña trasladado a la edad adulta. Ojalá nunca me dé miedo ser clara y expresarme libremente con mi música. Si alguna vez pasa eso, está claro que hemos perdido la batalla, una muy grande.

Afirmas que tu trabajo de estos dos últimos años es catártico: “La música tiene poder sanador para el que la hace y para quien la escucha”. Ahora que estás en gira, ¿Y el público participa de esa catarsis?

Los escenarios siempre han tenido esa intensidad que no se encuentra en ningún otro momento. Para mí siempre ha sido el lugar de la verdad, donde podía ser yo misma y donde era completamente feliz. Eso no ha cambiado, pero sí que se ha intensificado con este disco. Las primeras presentaciones eran brutales. La gente me gritaba entre las canciones, me decía “valiente”, “nos has salvado”… Era muy fuerte sentir que lo que para mí había sido algo tan necesario también formaba parte de la gente de una forma intensa y buena, que la catarsis se daba en las dos direcciones. A veces acabo ‘Merichane’ y miro a alguien del público, nos quedamos conectados unos segundos, como diciéndonos, “oye, esto también es mío”. Se están produciendo momentos únicos que no olvidaré nunca.

El regreso de los festivales a la normalidad genera en el público dosis extra de ilusión. Y tú respondes con tu gira La Puta Rave, que añade “caña” a tus canciones apoyándote en la electrónica, la imagen y la danza. ¿Qué podemos esperar de tu actuación?

Como dices, a este concierto traigo LA PUTA RAVE. Para mí es algo muy especial porque es la evolución natural de lo que pasó el año pasado. Ya entonces el tecno estaba muy presente y el final del concierto era claramente el punto de partida de lo que estamos haciendo ahora.

Yo sentía que quería ir un paso más allá, que las canciones estuvieran unidas, que hubiera una conexión entre ellas, preparar un viaje donde lo importante no siempre fuera mi voz, o mi cara, sino lo que pasa en general. Que lo que hay en el escenario te lleve a sentir la música de otra manera. De hecho en estos mismos conciertos invito a la gente a bailar si quieren, pero si no, a sentirlo como les apetezca, mirando o no el escenario, cerrando o no los ojos…

Una de las cosas que más me gustan de las raves es que siento que lo que pasa ahí es algo único, es un viaje musical que te lleva a experimentar y a conectar con una misma, y ojalá quienes vengan a nuestra PUTA RAVE sientan algo así, se dejen llevar como nosotras lo hacemos en el escenario y se sientan libres para expresarse como quieran.

¿Y qué puedes esperar tú de nosotros? ¿Qué recuerdo guardas del Palencia Sonora?

Tengo recuerdos preciosos, no solo del festival sino de Palencia en concreto. Fui de pequeña con mis padres y volver a tocar me parece una oportunidad preciosa para volver a recorrerla. Estamos deseando volver este año.

-Publicidad-

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingresa tu comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí