CSIF destaca que el Gobierno estudiará las ayudas económicas que se puedan ofrecer al nuevo inverso
ICAL
El preacuerdo alcanzado ayer para reflotar Siro contempla mantener una subida salarial pactada de un dos por ciento en los próximos cuatro años y, si los objetivos de producción se consiguen, “con criterios demostrables y claros, se elevará ese porcentaje hasta el cuatro por ciento a partir del cuarto ejercicio, un dos por ciento el quinto y un dos por ciento el sexto.
CSIF informó de que tras la maratoniana reunión celebrada la pasada noche en el Ministerio de Industria, hasta las 3 de la madrugada, se logró otro elemento positivo, ya que el Gobierno estudiará las ayudas económicas que se puedan ofrecer al nuevo inversor, pero hará un seguimiento de la evolución de la empresa.
El sindicato valoró las mejoras conseguidas por el Gobierno, en su mediación con el nuevo inversor “inglés” de Cerealto Siro, porque “siendo pocos los avances, y estando supeditados a determinados condiciones, sí alberga nuevas esperanzas para los trabajadores y para el futuro del grupo galletero, desechando ya los peores temores, como es el cierre de plantas”. “Ahora, esperamos que las mejoras comprometidas para los empleados se vayan materializando a medio y largo plazo”, indicaron.
Esta organización remarcó que, llegado a este punto, lo que toca es actuar “con responsabilidad y sentido común”, por parte de todas las partes implicadas: empresa, nuevo inversor, administraciones y trabajadores.
Horas cruciales
Advierte demás que “las próximas horas son cruciales para asentar el acuerdo sobre el futuro de Siro, y lograr el mantenimiento de todos los puestos de trabajo”.
Tras la visita, mañana sábado, de la ministra de Industria a las plantas, se realizarán asambleas y votaciones en algunas de las plantas, para sacar adelante la nueva propuesta del plan de viabilidad del grupo industrial. “Esto no es truco o trato, sino susto o muerte. No hay más opciones”, indica CSIF.
“Es el momento de no politizar, y de volcarnos todos con la defensa del empleo, y la continuidad de un grupo que, a pesar de su actual crisis financiera, sigue siendo una referencia en la industria agroalimentaria de Castilla y León, y un motor importante de desarrollo en el medio rural”, remarca CSIF, que le recuerda al Gobierno autonómico unas palabras hechas ayer por la ministra: que la Junta de Castilla y León debe ser parte de la solución de la viabilidad de Siro.
En las causas que han llevado a Siro a la crítica situación financiera actual y a su abultado endeudamiento, está también la deficiente gestión que se ha hecho en los tres últimos años, con inversiones y apertura de fábricas en otros países europeos y de México, “un aspecto que no hay que perder de vista y que hay que analizar”.
