La consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral; dialoga con el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, en el borde del viaducto de la variante de Guardo. / Brágimo (ICAL)

La Junta, que pondrá 14,1 millones y da un plazo de 29 meses, activa la excepción del artículo 234 de la Ley de Contratos del Sector Público

El Consejo de Gobierno autorizó la semana pasada la Consejería de Movilidad a gastarse 14,1 millones de euros en la Variante de Guardo. Y ahora, la cartera que dirige María González Corral acaba de lanzar el procedimiento para contratar la culminación de un viaducto que lleva una década parado.

14,1 millones de euros para contratar las obras de finalización de la variante de Guardo

Una licitación que no será como las habituales, en las que la administración realiza el proyecto (o lo encarga de forma externalizada) y bajo ese documento busca a la empresa que lo realice. No. Porque en esta ocasión, la Consejería de Movilidad ha activado la excepción que permite el artículo 234 de la Ley de Contratos del Sector Público: Esto es, la “Presentación del proyecto por el empresario: La contratación conjunta de la elaboración del proyecto y la ejecución de las obras correspondientes tendrá carácter excepcional y solo podrá efectuarse en los siguientes supuestos cuya concurrencia deberá justificarse debidamente en el expediente”:

El modelo constructivo

Porque entiende la Junta que, aunque la autocimbra con la que se construyeron los primeros metros del viaducto de la Variante de Guardo es el método más idóneo, “sin embargo, los medios auxiliares a utilizar, es decir, las propias características de la autocimbra y del sistema de guiado, condicionan el detalle concreto del procedimiento constructivo que será particular y propio de cada empresa por lo que esa definición es la que resulta determinante a la hora de la contratación”.

De igual forma, justifica esta excepcionalidad de contratar la redacción el proyecto y su ejecución a la vez en que “hay que destacar la problemática de cálculo, modelización y comprobación de una estructura existente o parcialmente ejecutada, que no es exactamente igual que la correspondiente a los proyectos de puentes de nueva construcción. Por consiguiente, los licitadores deberán proponer, cuando así lo consideren oportuno, criterios alternativos de comprobación basados en sus propias experiencias y en normativas foráneas que puedan ser de aplicación. En cualquier caso, los licitadores habrán de justificar pormenorizadamente sus propuestas y todos los criterios utilizados, con libertad para proponer los medios auxiliares que consideren más adecuados”.

Imagen del viaducto inacabado de la variante de Guardo. Sus obras se pararon en 2013. / Google Street View

Por ello, “existen motivos de origen técnico que obligan a vincular al empresario a su solución propuesta, es decir, a la técnica de ejecución particular que oferte, como porque se trata de una obra de dimensiones excepcionales y de dificultad técnica singular que requiere que la solución aportada haya tenido en cuenta los medios particulares y la capacidad técnica concreta de la empresa”. De igual forma, la Junta trata de ganar en tranquilidad, dado que a la empresa que finalmente ejecute la obra no podrá alegar que se le piden cosas imposibles, al ser la constructora quien aporte el proyecto para terminar el viaducto.

Del mismo modo, también destaca la Junta que de esta forma se podrán aligerar los plazos administrativos, al adjudicar de una sola vez, el proyecto constructivo y la ejecución de las obras.

Los plazos

La Junta divide el proyecto de culminación de la variante de Guardo, que ya tiene en uso su parte oriental (entre la CL-615 y la CL-626 a la altura del cementerio de Guardo), en tres anualidades. La de 2024, 2025 y 2026.

Inauguración de la parte este de la variante de Guardo, la que no estaba vinculada al viaducto, en diciembre de 2020.

Esa sería la justificación de que en los actuales presupuestos de la Junta no existiera dotación económica para esta partida, que alcanzará los 14,1 millones de euros. Para ese primer año existirá una partida presupuestaria de 2.500.000 euros. Para 2025, de 8.500.000 euros y para 2026, de 3.099.350,31 euros.

En cuanto a los plazos, durante los primeros meses no se verán obras sobre el viaducto o sobre las zonas anexas. Habrá, al menos, siete meses en los que los trabajos sean administrativos. Tres meses para elaborar el proyecto, otros tres para que la Junta lo dé de paso y uno más para la redacción del plan de seguridad de la obra. Solo entonces, comenzarán los verdaderos trabajos, con 22 meses de plazo.

Para la adjudicación de este proyecto, uno de los más grandes que asume la Junta de Castilla y León en la provincia de Palencia en los próximos años, por detrás del Hospital Río Carrión, la parte económica no será la más valorada: la mejor oferta económica, esto es, la más baja sin incurrir en baja temeraria obtendrá 40 de los 100 puntos.

Asfalto con caucho

Los otros 60 se dividirán entre la experiencia del personal al mando, los materiales elegidos o los vehículos que se utilizarán, entre otros muchos aspectos técnicos.

Sin embargo, sí se han establecido varios condicionantes sin los cuales las empresas quedarán descalificadas o penalizadas posteriormente. Por un lado, el uso de asfalto mejorado con caucho. Precisamente, en Guardo hay una fábrica que se encarga de crear el polvo de neumáticos reciclados que luego se usa en la elaboración de estas mezclas bituminosas.

Renecal distribuirá su polvo de neumáticos por el asfalto de las carreteras de toda España

La otra condición es que el personal al mando de la obra goce de estabilidad laboral y que para las labores de ejecución se contrate a personas en riesgo de exclusión social.

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